La CEOE propone como reto al próximo Gobierno resolver la falta de empleados turísticos

«El tema laboral no está resuelto. Se está gestionando y se están cubriendo vacantes como se está pudiendo, pero quedan vacantes por cubrir», ha asumido el presidente del Consejo de Turismo de la CEOE, Juan Cierco, durante la presentación este jueves sobre las prioridades de las empresas del sector turístico de cara a la próxima legislatura. Uno de los obstáculos, apuntan los empresarios, es la falta de vivienda para los empleados que acuden a trabajar por temporadas a zonas como Ibiza. En esta línea, las empresas miran directamente a las viviendas de uso turístico, que limitan la oferta de pisos en alquiler. «Estas viviendas han existido siempre y tienen que seguir existiendo, pero tienen que hacerlo en un marco legal, aceptable…», ha insistido Cierco.

No obstante, el obstáculo para contratar trabajadores no está solo en la falta de vivienda, sino en conseguir hacer del turismo un sector en el que los jóvenes quieran trabajar. «Ha habido una migración de trabajadores a otros sectores porque fue la única industria que se quedó a cero durante la pandemia. Lo que planteamos es que las vacantes tienen que ser atractivas», ha recalcado la directora de Turismo, Cultura y Deporte de CEOE, Inmaculada Benito. ¿La receta? «Reputación, planes de formación, formaciones para el empleo (que sean atractivas...). Hay que tener una visión holística alrededor de los recursos humanos».

Los empresarios turísticos no solo ven un reto en la atracción y la retención del talento, sino que consideran que el próximo Gobierno debe poner su foco insistiendo en que «el turismo es la herramienta que ha ayudado a España a recuperarse después de la pandemia». La CEOE propone lo que ha denominado un «test de competitividad turística», cuyo objetivo es que «todas las políticas públicas sean evaluadas mirando a la industria turística». «Cuando se tomen decisiones alrededor de políticas sociales, agrícolas, o tecnología, por ejemplo, se tiene que mirar el impacto que tiene en esta actividad», ha apuntado De Benito. La propuesta de los empresarios incluye la petición de realizar una auditoría «de la regulación sectorial» a la que están sometidas las empresas y el establecimiento de un «marco fiscal adecuado», junto con un análisis de coste-beneficio de las nuevas normativas que se pongan en marcha.

La CEOE pide al nuevo Gobierno, además, desarrollar un mapa nacional de actuaciones «para la regeneración de destinos turísticos», con un plan de inversiones detallado.

Los empresarios consideran además que el Instituto de Turismo de España, Turespaña, debe ser renovado. «Está haciendo una labor estupenda, pero nació en el año 86 y se tiene que reinventar y actualizar», ha apostillado la directora de Turismo. En concreto, la CEOE considera que Turespaña «se debe profesionalizar, se tiene que analizar toda la red de estructura internacional que el Gobierno de España tiene, lo importante es que esas oficinas que tenemos en el extranjero nos permitan anticipar decisiones. Nos tenemos que poner a hablar, y crear un órgano publico-privado», ha insistido.

Los empresarios creen clave poner en marcha un modelo que permita «acelerar el trámite de visados con mercados estratégicos», para no perder competitividad con otros países. «Para que vengan turistas de países de donde aún no vienen necesitamos conexiones directas, visados, y promoción, hay muchos países donde creemos que somos conocidos, pero a muchos ciudadanos asiáticos les da igual a dónde volar», ha recalcado Cierco, solicitando: «Los visados tienen que ser cuestión de horas o pocos días, la burocracia no puede ser un problema».

Con estas medidas, apunta la CEOE, España podría «consolidar su liderazgo», en competitividad turística y mantener la aportación del sector al PIB español (15%) y al empleo (15%).