Un influyente senador de EE.UU. propone suspender a Argentina del G-20 por la nacionalización de YPF

Lugar, el republicano de mayor rango en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, presentó un proyecto de resolución el pasado día 10 para condicionar la presencia de Argentina en el G-20 a que ese país «se adhiera a las normas internacionales de relaciones económicas y el compromiso del imperio de la ley».

Consultado este lunes por Efe, el Comité de Relaciones Exteriores ha informado de que aún no ha programado un voto de la iniciativa.

Aunque la resolución no es vinculante -es decir no tiene peso legal-, con ella el senador Lugar pretende enviar un claro mensaje de que el Senado estadounidense desaprueba la nacionalización de YPF, que entró en vigor el 7 de mayo pasado, explicó el Comité.

El documento de cuatro páginas acusa a Argentina de incumplir sus «responsabilidades inherentes a la pertenencia en el G-20», grupo creado en respuesta a la crisis financiera global de 1997 y que reúne a 19 países y la Unión Europea.

La resolución pide que la Administración del presidente de EE.UU., Barack Obama, «trabaje con los gobiernos del G-20 para suspender la participación de la República de Argentina en el G-20 hasta que el Gobierno de Argentina haya demostrado plenamente su intención de adherirse a las normas internacionales de las relaciones económicas y se comprometa con (el respeto) del imperio de la ley».

Además, pide que el Gobierno de Obama trabaje con el resto de los países miembros de ese grupo para «condicionar cualquier restablecimiento de la pertenencia de Argentina en el G-20 a su demostrado cumplimiento con sus compromisos y obligaciones internacionales».

El Departamento de Estado de EE.UU. ya ha advertido de que la decisión del Gobierno de Buenos Aires de expropiar el 51% de las acciones de Repsol en la petrolera argentina YPF crea una clima un clima de inversión «muy negativo» y afecta «a toda la comunidad internacional».

Lugar, que lleva 36 años en el Senado de EE.UU., fue derrotado en las pasadas primarias republicanas de su estado, Indiana, por un miembro del movimiento ultraconservador «Tea Party», por lo que no podrá presentarse a la reelección en los comicios del próximo 6 de noviembre.