'Altsasu', una «ficción documental para cicatrizar heridas» envuelta en polémica
La Abadía estrena la obra de María Goiricelaya sobre el caso de la agresión a dos guardiaciviles y sus parejas y el juicio posterior
Un día en Alsasua
Madrid
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEl 15 de octubre de 2016, dos guardiaciviles fuera de servicio y de paisano se encontraban junto a sus respectivas parejas en un bar de la localidad navarra de Alsasua cuando fueron agredidos por un grupo de jóvenes. Tras varias idas y venidas ... judiciales, envueltas en un gran ruido mediático, el Tribunal Supremo condenó a los ocho agresores a penas de entre un año y seis meses a nueve años y seis meses de prisión.
En julio de 2020, José Sanchis Sinisterra y Carlos José Reyes convocaron a diez autores (cinco españoles y cinco colombianos) para un proyecto dramatúrgico en el Nuevo Teatro Fronterizo, titulado 'Cicatrizar: dramaturgias para nunca más'. En él participó María Goiricelaya, a quién Sanchis invitó a escribir una obra sobre alguna cicatriz, y ella eligió el caso Alsasua.
Así nació 'Altsasu' (el nombre de la localidad navarra en vasco), una obra que se estrenó en octubre de 2021 en Bilbao y llegará el próximo día 18 al Teatro de La Abadía. La propia María Goiricelaya, creadora junto a Ane Pikaza de la compañía La Dramática Errante, dirige el espectáculo, que interpretan Nagore González, Egoitz Sánchez, Aitor Borobia y Ane Pikaza.
Teatro verbatim
Se trata, dice la autora, de una «ficción documental», que oscila entre el teatro verbatim (en el que se reproducen palabras textuales de textos reales, no escritos para ser puestos en escena) y la ficción poética. «Nuestra intención es restañar heridas, indagar en la búsqueda del perdón, abrir un espacio de debate y reflexión sobre una cicatriz que sigue abierta».
La compañía ha puesto por escrito los objetivos de su propuesta: «contribuir a restañar las heridas y a desvelar las cicatrices, poner el acento sobre los aspectos éticos, jurídicos, filosóficos y psicológicos de la problemática. luchar por lograr la paz planteando el perdón, olvido y no repetición, recordando que la paz no sólo es la ausencia de violencia y temor, sino alcanzar la verdad, la justicia y la reparación; y buscar la cicatrización colectiva del dolor; una convivencia tranquila sin fractura social».
Al mismo tiempo, explica sobre el espectáculo que «el caso, plagado de puntos negros, constituye uno de los procesos judiciales más desconcertantes de todos los tiempos y a día de hoy, mientras que varios de los jóvenes siguen en tercer grado, lo que realmente ocurrió la madrugada del 15 de octubre de 2016 en Alsasua no se ha reconstruido judicialmente. Se trata de un caso rocambolesco de nuestra historia más reciente, que sigue abierto y al que la sociedad busca explicaciones. Esta es la historia de unos jóvenes, arraigados en su tierra, condenados a vivir en prisión. Un drama que retrata la realidad de unos chicos que se enfrentan a los avatares de la justicia».
María Goiricelaya insiste en que el espectáculo «quiere dar voz a todas las personas implicadas con respeto a sus relatos», y al tiempo «ahondar en el dolor particular de cada uno sin juzgarlo».
-
La protesta en Alsasua contra la Guardia Civil vuelve a perder fuelle
Miriam Villamediana
Petición de retirada
El estreno en La Abadía llega ya con ruido, ya que hace un mes el Grupo Parlamentario de Vox en la Asamblea de Madrid pidió que se retirara la obra de la programación del teatro por considerar que justificaba la agresión a los dos guardiaciviles y sus parejas. La Comunidad de Madrid, la más representada en el Patronato de la Fundación Teatro de La Abadía con tres miembros, respondió a través de su consejero de Cultura, Turismo y Deporte, Mariano de Paco, que el Gobierno regional «siempre estará del lado de las víctimas y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado», pero «también siempre al lado de la libertad de expresión».
La directora de 'Altsasu' es consciente de que el espectáculo recibirá críticas durante esta temporada en La Abadía. «Las críticas -dice- me parecen correctas si tienen intención positiva. El teatro es reflexión y crítica, debe generar debates, y estoy encantada con la pluralidad de miradas sobre la obra. El debate es democrático, la prohibición no. Hay puntos de vista irreconciliables, pero también hay que hablar de ellos».
Presiones y censura
Tanto ella como Juan Mayorga aseguran haber recibido presiones para que la obra no se presente en La Abadía. «Éste es un teatro independiente, y mi dirección lo es también. Los espectadores tienen derecho a criticar el espectáculo y también la pertinencia de su programación».
A la pregunta, tras los distintos casos en España de obras retiradas de cartel por «motivos económicos» o «ideológicos», de si está amenazada la libertad artística, Mayorga asegura que «todos tenemos que estar vigilantes, porque la censura lesiona a los censurados, pero empobrece a la sociedad». El dramaturgo y académico escribió un texto en 1999 a propósito de la censura sistemática a la que fue sometido Mijaíl Bulgakov por el gobierno soviético de Stalin: «Antes que por el intelectual, la censura debería ser combatida por el ciudadano. Éste es el más interesado en que a la inteligencia crítica no se responda con censura sino, a su vez, con crítica. Porque la autonomía del ciudadano depende de la autonomía de una cultura crítica».
Mayorga concluye que 'Altsasu' es un espectáculo «desafiante, que no busca la provocación, y sí a un espectador crítico. La libertad y la paz se defienden ejerciéndolas; La Abadía no tiene por qué asumir lo que dicen los espectáculos que se presentan en sus escenarios, pero sí tiene la obligación de darles voz».
'Moríos'
Antes que 'Altsasu', La Abadía estrena 'Moríos', una obra dirigida por Joan Arqué, con dramaturgia de Anna Maria Ricart y coreografía de Sol Picó, nacida a partir del confinamiento vivido durante la pandemia -especialmente en Igualada, localidad doblemente confinada- y la situación vivida por los más mayores. «Los protagonistas serán nuestros viejos -dicen sus responsables-, 'sin eufemismos'. Una edad a la que todos llegamos. ¿Qué lugar ocupan ahora? ¿Dónde se aposenta la dignidad en la vejez? ¿Cómo tratamos a esas personas?, ¿como niños, como personas no productivas? ¿Será así mi vejez? Estas son algunas de las cuestiones que se pueden despejar en la puesta en escena de 'Moríos' en la que una anciana ve desde su balcón la vida de un grupo de viejos, como ella, en una residencia».
Límite de sesiones alcanzadas
- El acceso al contenido Premium está abierto por cortesía del establecimiento donde te encuentras, pero ahora mismo hay demasiados usuarios conectados a la vez. Por favor, inténtalo pasados unos minutos.
Has superado el límite de sesiones
- Sólo puedes tener tres sesiones iniciadas a la vez. Hemos cerrado la sesión más antigua para que sigas navegando sin límites en el resto.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
SuscribeteMadrileño. Ingresó en la Redacción de ABC en 1985. Ha pasado por distintas secciones, pero siempre se ha dedicado a la información de música y artes escénicas. Es crítico teatral y de Danza
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesión
Esta funcionalidad es sólo para registrados
Iniciar sesiónEsta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete