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ABC Cultural

Los amores perdidos de Salinger

El francés Frédéric Beigbeder recrea en una novela el romance entre el escritor y Oona O’Neill

Salinger, en una imagen de 1952 GETTY IMAGES

DAVID MORÁN

Holden Caulfield se preguntaba adónde diablos debían ir los patos de Central Park en invierno, sí, pero seguro que a J. D. Salinger (1919-2010) le atormentó aún más otra pregunta: ¿adónde había ido a parar el amor de Oona ... O’Neill, ese romance que, según parece, acabó tirado en algún punto entre la playa de Utah y el horror de Dachau? Pregúntenle a Chaplin. O, mejor aún, a la guerra. Y es que, además de un un trauma que le acompañaría de por vida, la Segunda Guerra Mundial supuso para el autor de «El guardián entre el centeno» el abrupto final de su relación con la hija del dramaturgo Eugene O’Neill y futura esposa de Charles Chaplin.

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