POLÍTICA
Rajoy y Fabra diseñan una campaña europea de «perfil alto» para la Comunidad
El presidente del PP hará triplete en tierras valencianas, adonde acudirán dos o tres ministros, una decena de secretarios de Estado y cargos nacionales
La campaña que el Partido Popular va a realizar en la Comunidad Valenciana para las elecciones europeas del próximo mes de mayo se presenta como el primer aldabonazo de la gestión de Alberto Fabra desde que se puso al frente del partido en la región. El refrendo a sus políticas económicas y sociales, con medidas de ajuste muy duras en la primera parte de la legislatura, va a llegar por parte de la dirección nacional del partido y del Gobierno de Mariano Rajoy.
Es consciente el líder nacional de los populares de la importancia que tiene recuperar el pulso en autonomías como Madrid o la Comunidad Valenciana que son capitales para que su proyecto se pueda extender más allá de la cita electoral nacional prevista para finales de 2015.
Ese latido en ambas regiones parece ahora algo ralentizado provocado por el propio adormecimiento de los militantes del PP ante la desconfianza provocada por la judicialización de algunos casos donde están inmersos dirigentes del partido en ambas autonomías y por la larga serie de gobiernos con signo del PP que ha supuesto el lógico desgaste acentuado por la crisis económica.
La primera medida para despertar del letargo de la primera parte de la legislatura es el diseño que Mariano Rajoy ha realizado junto al presidente autonómico valenciano, Alberto Fabra, que va a consistir en un desembarco de numerosos cargos nacionales en la Comunidad Valenciana.
Intermunicipal clave
Él mismo va estar presente en Valencia tres veces en las próximas semanas. La primera cita será el día 27 del presente mes para presidir la entrega de los premios nacionales de Turismo que, por primera vez, salen de la capital de España y que suponen un reconocimiento a la labor que esta haciendo la Comunidad en este sector.
La segunda llegará con motivo de la intermunicipal del PP que se celebrará en la capital del Turia los días 4 y 5 de abril y que Rajoy presidirá. Será en ese encuentro cuando realmente arranque la precampaña a un mes y medio antes de la cita con las urnas.
El PPCV acelerará después el ritmo con la celebración de una convención regional en la que se profundizará con detalle en el programa regionalizado que se está elaborando desde el pasado mes de febrero.
El acto central, ya en el periodo de campaña, podría ser en Valencia, en la plaza de Toros donde Rajoy, Alberto Fabra, el cabeza de cartel para las europeas (aún por designar) y Rita Barberá, que será un activo fundamental en estas elecciones, tratarán de espolear a los militantes y votantes en general en un escenario talismán.
Para los mítines está prevista también la presencia de dos o tres ministros que dará la visión de las políticas europeístas que está aplicando Rajoy desde su llegada a la Presidencia del Gobierno. Alguno de ellos, incluso, tomará parte en actos sectoriales que la dirección regional del PPCV está acabando de perfilar.
Junto a ellos también van a «desembarcar» en las tres provincias de la Comunidad una decena de secretarios de Estado que completarán el entramado diseñado por Mariano Rajoy y por Alberto Fabra para hacer que la campaña para las elecciones europeas sea una simbiosis entre cercanía, con la participación fundamental de alcaldes, y visión nacional de la política española en Europa y sus grandes retos, donde todos los cargos mencionados anteriormente tendrán relevancia.
El reto de Fabra
El secretario general de los populares valencianos, Serafín Castellano, también ha acordado con el presidente del partido, Alberto Fabra, que éste tenga una participación en la campaña de perfil alto. No será como en otras ocasiones donde los líderes regionales mantienen una presencia casi testimonial, ya que en el caso de Fabra es la primera vez que expone su gestión autonómica a la crítica ciudadana a través de las urnas, aunque ya lo hizo con éxito como alcalde de Castellón.
Fabra va a utilizar como «banco de pruebas» la cita europea para pulsar el «grado de aceptación de sus políticas». La celebración de las 542 juntas locales del PPCV va a ser una herramienta muy útil para detectar las problemáticas que más acucian a los diferentes municipios de la Comunidad.
Con la oposición en pleno duelo de las primarias –solo el PSPV de Ximo Puig ha dejado atrás ya este farragoso proceso de desgaste interno–, el PPCV tiene la oportunidad de activar a sus potenciales electores que, según son los sondeos, podrían dar un «toque de atención» a los populares en las europeas pero que serían mucho más proclives a volver a depositar su papeleta con el anagrama de la gaviota en las autonómicas y municipales de mayo de 2015.

