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Hacia el enfrenamiento civil

Sin la voluntad firme de imponer la ley a quienes la violan es imposible la paz

Hermann Tertsch

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Estamos en vísperas de los primeros enfrentamientos civiles serios entre españoles desde la Guerra Civil. Si no hay una reacción muy drástica por parte del Estado, que no se espera, se van a dar muy pronto en Cataluña las primeras peleas violentas entre catalanes separatistas ... y no separatistas. Es lo que muchos temían, se va a llegar a las manos. Muchos se escandalizarán y preguntarán cómo hemos llegado a esto. Pues han sido muchos años dedicados a ello por los separatistas más o menos larvados, con el aplauso de gran parte de la clase política y periodística española. Que menospreciaron las alarmas y ridiculizaron a quienes lo anunciaban. El Estado renunció a defender el espacio público de todos. Y ahora ya se preparan los separatistas para culminar el secuestro. Se consuma la quiebra de la convivencia. Ya ha habido los primeros incidentes en diversas playas, entre otras en Calella, porque militantes separatistas, en su pretensión de ocupar todo el espacio público, quieren imponer por la fuerza su simbología de lazos y cruces amarillas y banderas golpistas. Son los aún leves encontronazos entre españoles separatistas y leales a España. Tarde o temprano se dará el primer incidente con consecuencias irreparables. El mártir de unos u otros. Pero está claro que el actual Gobierno español no tiene voluntad de aplicar la fuerza necesaria para poner fin al secuestro separatista de la región. Por lo que la amenaza genera en el resto de catalanes una reacción de indignación como sensación de indefensión, humillación pero también rabia y resistencia. ¡Compatriotas, nos estáis dejando solos!, gritaba literalmente ayer una mujer en un tuit desesperado. Muchos callarán por miedo, pero otros más decididos e impacientes actuarán. Porque se niegan a que en las playas se escenifique el secuestro de toda Cataluña por parte de una minoría militante racista y totalitaria, cada vez más fanatizada y violenta.

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