Jugamos a 'Neon Blood': una aventura cyberpunk a la española entre lluvia y luces de neón

En ABC nos hemos pasado el juego de una sentada (dura alrededor de 3 horas) y ha sido una experiencia que, pese a sus 'peros' que comentaremos más adelante, nos ha fascinado. No cabe duda de que 'Neon Blood' es la mejor carta de presentación para ChaoticBrain Studios. No solo han creado uno de los juegos españoles más destacados de 2024, sino que este trabajo les augura un futuro brillante.

Entrando de lleno en la historia, el título nos pone en la piel de Axel McCoin, el que fuera el mejor detective de Blind City y que ahora no es más que un pobre hombre enganchado a cierta droga (el Spark) que asola la ciudad. De golpe McCoin se verá envuelto en una serie de asesinatos relacionados con toda una conspiración que gira en torno a una disputa entre dos empresas que controlan la ciudad, donde él tiene mucho más que ver de lo qué piensa.

La historia es la propia de una película de detectives al uso (a la mínima que conozcas el género vas a saber que pasa a continuación), y aunque pueda pecar para algunos de falta de originalidad, los personajes están tan bien escritos que es llevadera y disfrutable.

Además, la ciudad está tan viva que casi es el elemento narrativo principal. Cada rincón está lleno de referencias y detalles que ayudan más si cabe a mejorar la ambientación, que ya de por sí es redonda. Como comentábamos antes, la personalidad propia de este juego reside en su apartado gráfico, un magnífico trabajo de pixel art combinado con escenarios tridimensionales de lujo. Consigue crear una ciudad única, y que poco tiene que envidiar a las de los grandes representantes del género.

Sin embargo, el mayor 'pero' de 'Neon Blood' es lo que le hace videojuego: su jugabilidad. Tanto el combate como los puzzles nos han parecido innecesarios (los primeros) y engorrosos (los segundos). De hecho nos hace pensar si el estudio madrileño quería hacer en un principio una aventura gráfica y se vieron forzados a incluir los combates en un intento de venderlo más como un RPG y menos como un juego narrativo, que es realmente lo que ofrece. Al final es un juego ligero, de pequeña escala, que no te pone en muchos aprietos porque tampoco le da tiempo a construir una jugabilidad profunda.

No hay apenas progresión, y estos encuentros parecen que están encorsetados para suceder en momentos clave de la trama, y poco más. Solo hay que echar un vistazo a la interfaz de los combates, sosa y demasiado minimalista, que choca con el resto del apartado gráfico, bien pulido. Es un pena, porque ensucia un poco el resultado final. A veces menos es más. Y esa es tal vez la mayor pega que se le puede encontrar a 'Neon Blood', que trata de hacer varias cosas interesantes, pero no profundiza lo suficiente en la mayor parte de ellas.

No obstante, el juego tiene cosas muy buenas, en particular su narración y la forma en que se presenta, con personajes interesantes e incluso la intercalación de escenas animadas al estilo tradicional. La traducción en español también es acertada y los creadores se han permitido romper la cuarta pared en algunos momentos para tirarnos guiños sobre la propia industria del videojuego. Al final se le podría pedir más en términos de innovación jugable y duración, porque ningún juego es perfecto, pero el regusto final es agradable y no amargo.

ChaoticBrain Studios ha logrado con muy pocos recursos un título notable. Nos apena ver que se han desperdiciado recursos en el combate cuando sin él es igualmente bueno o se podría haber dedicado ese tiempo en crear mejores puzles. Sin embargo, es un título muy disfrutable de principio a fin con una historia que engancha y te mantiene atrapado en lo que dura. Su diseño y estilo son muy peculiares, pero atrapan y casan muy bien entre sí ofreciendo una experiencia inmersiva y divertida.

Un título muy recomendable para todo aquel que le llamen las aventuras que cargan todo su peso en la narración, y que no quieran complicarse en mecánicas jugables complejos o en juegos excesivamente largos.