Por qué deberías prestar tanta atención al Pilates como a los entrenamientos de fuerza

Cuando se escucha hablar acerca de Pilates, la mayoría de las veces se asocia a una disciplina para mujeres o de rehabilitación dirigida por el fisioterapeuta o traumatólogo, pero nada que ver con la realidad, pues se trata de un concepto mucho más amplio. Esta disciplina fue inventada por un hombre, Joseph Pilates, con el objetivo de mejorar su forma física y conocer mejor su cuerpo, siendo un método no específico para un tipo de género; aunque es sus inicios fuera desarrollado para soldados de la Primera Guerra Mundial para mejorar su condición física y la rehabilitación de lesiones.

En Summum hemos profundizado acerca del tema con Gemi Osorio, experta en esta disciplina y propietaria del centro ‘Pilates y Movimiento’ en la capital. La entrenadora nos cuenta que cada vez son más los hombres que acuden a su centro con el objetivo de trabajar zonas que con el fitness convencional no logran ejercitar. “Es importante conocer que las progresiones de esta disciplina van siendo más exigentes y desafiantes a la vez que se va aumentando de nivel, requiriéndose más fuerza y control para su ejecución ya que se está trabajando la musculatura de todo el cuerpo”.

“Pilates es un complemento ideal para realizar cualquier otro deporte, ya que mejora el rendimiento deportivo y la recuperación, evitando lesiones. Resulta ideal hacerlo si practicas entrenamiento de fuerza o deportes de resistencia o potencia (crossfit, fútbol, tenis, natación, running, boxeo, etc…)” aclara y añade que “Pilates hará que vuestro cuerpo esté mucho más preparado para la exigencia y el rendimiento, evitando el acortamiento de músculos y tendones, desequilibrios musculares y ayudará a un rendimiento máximo en cualquier disciplina, ya que la musculatura se trabaja de forma completa y equilibrada, ganando así también control, fuerza y estabilidad en el núcleo del cuerpo”.

En cuanto a sus beneficios, enumera una extensa lista que habría que tener en cuenta si se va a practicar.

- Desarrollo de los músculos internos que ayudan a mantener el equilibrio corporal y dar firmeza a la columna.

- Corrige la postura, especialmente si se está mucho tiempo sentado.

- Ganancia de movilidad articular y flexibilidad en músculos y tendones de todo el cuerpo.

- Se logra un abdomen plano, fuerte y definido.

- Mejora del rendimiento deportivo.

- Se puede practicar a cualquier edad.

- Incremento de la resistencia física.

- Se trabajan músculos que no se llegan a activar en una rutina de fuerza.

- Descompresión de las vértebras de la columna.

- Se puede combinar con cualquier actividad deportiva o entrenamiento exigente.

- Prolonga las relaciones sexuales y las hace más placenteras, pudiendo disfrutar de nuevas y diferentes posturas por la ganancia de flexibilidad.

Tal y como cuenta Gemi, Pilates es una disciplina exigente que puede ayudar al cuerpo a desarrollar una musculatura fuerte y definida por la exigencia y el control de cada uno de los ejercicios. "Un hombre puede llegar a progresiones que en ocasiones resulta más complejo en una mujer por el gran desarrollo de la fuerza que requieren los ejercicios".

Para empezar, hay que saber que en Pilates clásico podemos encontrar desarrollos en suelo (mat), reformer, silla, Cadillac y barril. “Si nunca has practicado, te recomiendo que acudas a un centro especializado en esta disciplina y evites aprender de personas no cualificadas que durante estos años han degradado el método, llegando incluso a inventar movimientos que no tienen nada que ver con esta disciplina y en muchos casos no dejan de ser meros estiramientos”, puntualiza y comenta que si realmente se quieren obtener beneficios, recomienda la realización de Pilates dos días por semana.

“El cambio será más que notable en poco tiempo. Ya lo afirmaba Joseph Pilates. Si tu espalda es rígida con treinta años, entonces eres viejo. Si consigues que sea móvil y flexible a los sesenta, entonces te seguirás manteniendo joven”.