Lista para sentencia la primera demanda por los efectos secundarios de la vacuna del Covid

La empresa con sede en Maguncia considera infundada la acusación: «Hemos examinado cuidadosamente los problemas de salud descritos por el demandante en base a toda la información proporcionada», dice una portavoz. Pero el resultado de estas primeras demandas sentará las bases de muchas otras sentencias y por eso los abogados del laboratorio, a la espera de la inminente decisión del tribunal, siguen negociando con el afectado, elevando la oferta de un acuerdo entre las partes que paralizaría el juicio en el último minuto.

En Baviera ha comenzado también esta semana una audiencia de apelación en los procedimientos contra el fabricante Astrazeneca. Hace seis meses, el tribunal de distrito de Hof desestimó la demanda de una mujer por daños y perjuicios contra el grupo sueco-británico y la víctima presentó el recurso, insistiendo e las alegaciones sobre severos problemas de salud que atribuye a la vacunación. Las dos demandas civiles se encuentran entre las primeras, pero la casuística es muy diversa y afecta a todos los Bundesländer.

«Actualmente hay 209 demandas por daños y perjuicios contra los fabricantes de vacunas Covid-19 pendientes en los tribunales», informa el Ministerio Federal de Salud. Una de cada 10.000 personas vacunadas contra el Covid-19 en Alemania ha solicitado que se le reconozca el daño derivado de la vacuna, según una investigación de la publicación Zeit Online, que hasta junio registra que 8.886 personas de los casi 65 millones que han recibido al menos una dosis de la vacuna han presentado una solicitud de reconocimiento de daños derivados de la vacunación , según los datos proporcionados por las autoridades de los 16 estados federados alemanes. Las autoridades han tramitado el 41% de las solicitudes, es decir, 3.488, de las cuales solo se han tramitado 379 casos, lo que arroja una tasa de reconocimiento del 11%, y 209 juicios han comenzado.

En relación al número de personas vacunadas, los habitantes del estado de Turingia son los que más solicitudes realizaron, con más del 22 por cada 100.000 vacunados, casi el doble de la media alemana. En segundo lugar está Mecklenburgo-Antepomerania, seguido de Baviera. El estudio destaca que entre los siete estados con las tasas de solicitud más altas se encuentran los cinco nuevos «Länder», el territorio de la desparecida República Democrática Alemana (RDA), la Alemania comunista hasta la caída del Muro de Berlín.

En cuanto a las enfermedades más frecuentes atribuidas a las vacunas destacan la inflamación del músculo cardíaco (miocarditis) y los casos de trombosis venosa de los senos paranasales, en ocasiones combinados con falta de plaquetas. Esta combinación se detectó en su día como un efecto secundario muy raro pero grave de la vacuna de AstraZeneca, por lo que dejó de ser inoculada en muchos países. Otro efecto secundario de esta vacuna reconocido en varias ocasiones es el Guillain-Barré, una inflamación del sistema nervioso que suele manifestarse con parálisis.

Según establece la ley, las personas que creen haber sufrido daños derivados de la vacuna pueden solicitar su reconocimiento, por ejemplo, para recibir una pensión mensual u otro tipo de beneficios, como rehabilitación, tratamiento hospitalario, curas termales y productos de salud y apoyo.

El reconocimiento del daño derivado de la vacuna implica automáticamente que las personas afectadas recibirán una pensión vitalicia, incluso en el caso de una inflamación del músculo cardíaco, que cura sin consecuencias en la mayoría de los casos y es tratada temporalmente, puede dar lugar al derecho a una indemnización en forma de pensión.