Condenado a 20 años de prisión Dominique Pelicot por violar a su esposa y sedarla para ofrecerla a medio centenar de hombres durante una década

La pena, solicitada por la Fiscalía, es la máxima contemplada en Francia. El hombre, de 72 años, se ha puesto en pie para escuchar la sentencia sin expresar ningún tipo reacción. Su exmujer, Gisele, que ha acudido a la sala arropada por sus tres hijos, ha apoyado la cabeza en la pared la oír la sentencia.

Al terminar, la abogada de Dominique, Beatrice Zavarro, ha confirmado la pena y ha señalado ante los medios que aún no se había decidido si apelarán la sentencia. Todos ellos tienen 10 días para hacerlo.

La lectura ha comenzado pasadas las 9.30 de la mañana para pasar a leer la sentencia de los 51 acusados. Todos ellos han sido declarados culpables y solo uno de ellos, para quien se pedía 4 años, ha sido absuelto de violación y condenado por un delito de agresión sexual.

Los acusados han recibido uno a uno sus respectivas condenas, que van entre los tres y los 15 años de prisión. Algunos de ellos acudieron a la casa de los Pelicot en una ocasión pero otros llegaron a repetir varias veces. Es el caso de Charly A, un trabajador temporal de 30 años y el más joven en cometer los hechos -tenía entonces 22 años-, para el que el juez ha pedido 13 años. Ha sido declarado culpable de violar a Gisele seis veces en su casa entre 2016 y 2022.

La misma edad tenía Joan K., un militar que ahora tiene 27 años y que ha sido condenado a 10 años por violar en dos ocasiones a Gisele en su casa en 2019 y 2020.

Dominique D, un camionero de 45 años, acudió hasta seis veces a su casa entre 2015 y 2020. Su condena es de 13 años, mientras que la más alta, de 15, es la pena de Romain V., un jubilado de 63 años que visitó en seis ocasiones la casa de Pelicot entre diciembre de 2019 y enero de 2020.

Uno de los acusados, Hassan O. se encuentra actualmente prófugo y ha sido declarado culpable en ausencia. Los condenados han tenido un tiempo para hablar con sus abogados antes de ser trasladados a prisión. Muchos de ellos han llegado a los juzgados acompañados por sus familias y cargados con mochilas ante su previsible entrada en prisión.

Antes de la lectura del veredicto, el colectivo feminista Amazonas de Aviñón, en el sur de Francia, pegó carteles alrededor del tribunal con el lema: «Navidad en prisión, Pascua entre rejas», «la vergüenza cambió de bando».

«La violación afecta a las mujeres en todo el mundo. Es por eso que todas las miradas están puestas en lo que ocurrirá», ha explicado a la AFP una representante de este movimiento. Un total de 180 medios --86 extranjeros-- estaban acreditados para seguir la lectura del veredicto.

A su salida del juzgado, Gisele ha hecho unas declaraciones a los medios, a los que ha reconocido lo duro que ha sido acudir cada día a escuchar y conocer las revelaciones del caso. No obstante, asegura que ha merecido la pena: «Nunca me he arrepentido de la decisión de hacer partícipes a toda la sociedad», ha reconocido, a sabiendas de que se ha convertido en un símbolo a nivel nacional e internacional.

No ha querido irse sin agradecer a los medios tanto el trato recibido como el seguimiento del caso y la forma tan «respetuosa» con la que se lo han transmitido a los ciudadanos. Sí que ha evitado valorar las penas de los condenados y responder las preguntas de los periodistas.