Los últimos temporales ponen a prueba a toda la costa antes de Semana Santa

Comunidad Valenciana: «No tenemos la garantía de que las playas vayan a estar en perfecto estado»

En la Comunidad Valenciana los empresarios turísticos no han notado a día de hoy un descenso en las reservas pero temen que las « imágenes de playas destrozadas » provoquen cancelaciones en una época del año marcada por los viajes de los turistas nacionales. «Si nuestros clientes siguen viendo en el telediario las playas en su estado actual no vendrán en Semana Santa», explica el presidente de la Federación Hotelera de la Comunidad Valenciana, Luis Martí . El Gobierno ha presupuestado obras de urgencia por un importe de 8,85 millones de euros.

En la región, el temporal provocó daños en cerca de sesenta municipios costeros, de acuerdo con los datos oficiales de la Generalitat, aunque los principales destrozos se produjeron en las playas del sur de la ciudad de Valencia, Cullera, Jávea y Almenara. En este pueblo del litoral de Castellón la fuerza de las olas arrasó literalmente su paseo marítimo , conforme pudo comprobar en primera persona el ministro de Fomento, Íñigo de la Serna, quien se comprometió a ejecutar obras que, más allá de reparar los daños, protejan la playa de los temporales en un municipio habituado a convivir con los destrozos que provocan los temporales debido a la falta de abrigo en una playa a mar abierto.

Más al sur, la localidad de Cullera, uno de los principales destinos turísticos para los madrileños que eligen la Comunidad Valenciana para pasar sus vacaciones, ha aprobado la petición de zona catastrófica.

El concejal de Playas, Salvador Tortajada , reclama al Gobierno, a la Generalitat y a la Diputación de Valencia que apliquen con rapidez las medidas necesarias para paliar los daños (calculados en más de tres millones de euros) porque «resulta imposible hacer frente a toda esta tarea de reconstrucción con los recursos municipales ».

En ese sentido, la Diputación de Valencia coordina las tareas de evaluación de daños de todos los municipios afectados. El Jefe de Servicio de Asistencia, José Luis Romero , explica a ABC que los «efectos secundarios del puerto de Valencia» y el régimen de corrientes han centrado los daños al sur de la capital, donde «se ha perdido mucha arena y algunas playas han llegado a desaparecer».

Romero explica que el temporal ha dañado infraestructuras asociadas a las playas, como las duchas o los lavaderos de pies, que ahora hay que arreglar a toda prisa. Al respecto, considera que la velocidad con la que se acometen las obras dependerá de la llegada de las ayudas del Estado y la Generalitat, así como de la capacidad de endeudamiento de los ayuntamientos .

En el caso de la ciudad de Valencia, el Consistorio también reclamó la declaración de zona catastófrica para las playas de Pinedo, el Árbol del Perro, el Salero, la Garrofera, la Devesa y el Perellonet-el Recatí, donde el agua se comió literalmente casas de urbanizaciones que cuando se construyeron estaban a cien metros del mar tras engullir el paseo marítimo.

Un panorama desolador ante el que el presidente de la patronal turística recela del «baile de competencias» entre administraciones y lanza un mensaje claro: «Nos da igual quien sea el responsable, pero los destrozos hay que arreglarlos ». En esa línea, el representante de los empresarios expresa «la preocupación porque no tenemos garantía a día de hoy de que las playas vayan a estar en perfecto estado de revista para Semana Santa». Por ello, reclama a las administraciones que establezcan una «fecha límite» que asegure el buen desarrollo de una campaña que arrancará a finales de marzo.

Por contra, José Luis Romero considera que los ayuntamientos centrarán sus esfuerzos en tener listas sus playas en junio ya que, explica, «Semana Santa es la época del año en la que más fría está el agua del mar y no es época de baño».

Región de Murcia: consignados 4,6 millones de euros

Desde Berlín, la consejera de Agua, Agricultura y Medio Ambiente, Adela Martínez-Cachá responde a ABC que el Ejecutivo de Mariano Rajoy ha actuado con sensibilidad para acometer un trabajo contra reloj y que, en zonas como la Manga del Mar Menor, necesita cuidados especiales para el proceso de extracción de la arena, la aspiración en sentido contrario para que no haya una resuspensión de partículas. «Se ha calculado en una operación exquisita», tilda la consejera, «agradeciendo» al Ministerio responsable que haya aprobado cada una de las actuaciones previstas en la memoria dirigida por su departamento.

El Ministerio ha aprobado una consignación de 4,6 millones para que las playas de esta comunidad luzcan con todo su esplendor tras el temporal que sacudió este invierno a Los Alcázares, Santiago de la Ribera (San Javier) y Lo Pagán-Villananitos (en San Pedro del Pinatar), entre otros municipios.

Aquí, los daños consisten en pérdida de arena, daños en paseos marítimos y pérdidas de pasarelas y desprendimientos. Además, la pérdida de arena se ha dejado sentir especialmente en las playas del Mar Menor. Según la Consejería, «se ha producido una importante pérdida de arenas en las playas del Mar Menor, además de que también habrá que retirar arena que está en la laguna para poder recuperar la vegetación».

El saldo de las inundaciones y temporales en esta comunidad ha sido de «16,7 km de playas y 159 puntos de erosión donde se ha perdido por completo la arena y que estarán listas para que los visitantes las tengan como en su memoria», recalca Martínez-Cachá.

«Se está haciendo un esfuerzo importante porque el turismo en esta zona es fundamental, así que las playas estarán en perfecto estado de revista», completa la consejera responsable.

Málaga: Paseos marítimos destrozados, merenderos derruidos y mobiliario desaparecido

El temporal que asoló Málaga el pasado mes de diciembre se cebó de manera especial con el litoral occidental de la provincia. Paseos marítimos destrozados, merenderos derruidos por efecto de las avenidas y mobiliario desaparecido fueron los daños principales que sufrieron unas playas a las que además les fue engullida buena parte de su arena y que amanecieron, tras la tormenta, llenas de cañas y todo aquello que los arroyos desplazaron hasta ellas. Una circunstancia que, ya entonces, motivó la queja de los alcaldes por la falta de limpieza de estos cauces por parte de la Junta de Andalucía, responsable de los mismos.

Ahora, el Gobierno trabaja ya con ritmo decidido en la regeneración del litoral con un solo objetivo: permitir que las playas estén en perfecto estado de revista para la próxima Semana Santa . El Gobierno adjudicó todas las obras previstas en los municipios afectados con un presupuesto de 4,1 millones de euros para la provincia. Marbella, Casares, Manilva y Estepona fueron los más deteriorados, pero los daños llegaron también a Mijas, Fuengirola, Benalmádena, la capital y Rincón de la Victoria.

De momento, se acometerán trabajos de recogida y limpieza de playas, así como de infraestructuras dañadas, para ya a partir de marzo comenzar la reposición de arenas.

El Gobierno balear destinará 300.000 euros para reparar el dique de Cala Rajada

El Gobierno balear, que preside la socialista Francina Armengol, ha venido anunciando en estas últimas semanas diversas actuaciones para intentar paliar los daños ocasionados por el temporal de nieve, lluvia y viento que padecieron las Islas —en especial Mallorca— entre el 17 y el 24 de enero.

Uno de los incidentes más destacados se produjo en el municipio mallorquín de Capdepera, en concreto en la zona de Cala Rajada, donde el temporal destrozó una parte del dique marítimo ubicado en ese núcleo turístico . En relación a este asunto, el Govern ha anunciado ya una inversión de unos 300.000 euros para arreglar la parte estructural dañada. El propósito del Ejecutivo regional es iniciar los trabajos este mismo mes de febrero , por lo que podrían estar concluidos antes de la próxima Semana Santa.

El Consejo de Gobierno autonómico acordó además, en la última semana de enero, solicitar al Consejo de Ministros que declarase todo el territorio de Baleares « zona gravemente afectada » por el citado temporal.

Por lo que respecta a los daños ocasionados en las playas, las localidades mallorquinas de Sant Llorenç des Cardassar y de Cala Millor —dos de las más afectadas— iniciaron hace ya varios días diversas tareas de recuperación, que incluyeron la retirada de residuos plásticos y el arreglo de distintos desperfectos . En cuanto a la recolocación de la arena, se llevará a cabo una vez que las condiciones meteorológicas se hayan estabilizado. En cualquier caso, cuando empiece la temporada turística dichas playas y la ibicenca denominada d'en Bossa estarán ya en perfecto estado.

Cataluña: El temporal de mar más virulento de los últimos 14 años

En Cataluña las autoridades estiman que su litoral ha sido azotado por el temporal de mar más virulento registrado en los últimos 14 años . Desde el norte, donde la boya localizada en el litoral de Begur (Gerona) registró olas de hasta 10,8 metros de altura , hasta el extremo sur, donde la fuerza de las olas se cebó en el paseo de las Casas d'Alcanar, en el límte de la provincia de Castellón, los daños fueron generalizados. En algunas localidades, literalmente, la playa desapareció, como es el caso de Malgrat de Mar (Barcelona), poniendo de nuevo sobre la mesa la sostenibilidad de un litoral que, periódicamente debe regenerar sus playas mediante aportaciones de arena . La zona de cámpings de la localidad, próxima a la desembocadura de dos torrentes, resultó especialmente afectada, un serio problema de cara a la próxima temporada turística . El sistema de dunas artificiales que se instaló resultó insuficiente para contener la fuerza del mar.

Se produjeron también importantes afectaciones en el litoral de Badalona, donde las olas alcanzaron la zona de vías de Renfe y donde resultó afectado un colector de aguas residuales y el puente del Petroleó, que se adentra varias decenas de metros mar adentro. En la zona de playa del Fórum, en Barcelona, un dique resultó dañado.

En Tarragona, poblaciones como Torredembarra, Altafulla, Salou o Vilaseca también resultaron afectadas, sumándose todas al coro de voces que de punta a punta del litoral reclaman intervenciones urgentes para que todo esté a punto para la próxima Semana Santa . Particularmente, los alcaldes de la zona del Maresme, pidieron al Ministerio de Medio Ambiente que no solo active ya de forma urgente el plan de regeneración de playas, sino que lo complemente con medidas definitivas en formas de espigones o escolleras para evitar daños futuros.

País Vasco: las capitales de provincia, las más golpeadas

El viento se convirtió durante el fin de semana en el más peligroso enemigo de la ciudadanía vasca. Las fuertes rachas, que en algunas zonas llegaron a superar los 120 kilómetros por hora , obligaron al departamento de Seguridad autonómico a activar la alerta naranja. Con especial fiereza actuó en Vitoria, donde los bomberos atendieron un total de 313 avisos por los continuos desperfectos que el fenómeno provocó en las vías públicas. De hecho, algunas calles quedaron totalmente inaccesibles debido a la caída de árboles, señales de tráfico y planchas metálicas.

En el puerto de San Sebastián, ocho familias se vieron obligadas a abandonar sus hogares ante el riesgo de desplome de los edificios, aunque el Ayuntamiento de la capital guipuzcoana confía en que puedan regresar en los próximos días. Por otra parte, el aeropuerto de Bilbao canceló el despegue de cinco vuelos el pasado sábado a causa del viento, mientras que en el resto del territorio vizcaíno el desprendimiento de cables telefónicos y árboles también provocó la intervención de los bomberos.