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Un submarino nazi y un barco español del siglo XVI, víctimas del vertido de petróleo de BP en el Golfo de México

Son algunos de los 2.000 pecios cuya corrosión se ha acelerado a causa del desastre ambiental que en 2010 supuso la liberación al Atlántico de casi 800.000 toneladas de crudo

Según un estudio de la Unión de Geofísica Americana (AGU), este evento alteró las comunidades de microorganismos que vivían en el entorno de estos restos

G.L.S.

Los mares y océanos esconden bajo sus aguas una historia terrible de batallas , tormentas y naufragios. Pero alrededor de las naves hundidas, tristes y solitarias, la naturaleza ha sido capaz de tejer un sorprendente tapiz de vida sobre las cuadernas y los cañones ... navales. Si los pecios son muchas veces la tumba de marinos, son también un oasis de vida en las profundidades abisales, en los que crecen microorganismos, anémonas, corales y crustáceos.

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