Sanidad permitirá completar la segunda dosis con AstraZeneca a los menores de 60 que así lo deseen

Tal y como informó ayer la ministra en la rueda de prensa posterior al Consejo Interterritorial, Sanidad consultará al Comité de Bioética de España si es aceptable que los menores de 60 años que recibieron una primera dosis de AstraZeneca pueden tomar esta decisión o siguen la recomendación del Ministerio de Sanidad y combinan medicamentos diferentes, es decir, optan por Pfizer.

Sanidad ha pedido este informe de manera urgente a esta institución que asesora al Gobierno en debates éticos que tienen que ver con el mundo de la biomedicina. Este comité tiene también voto en la estrategia nacional de vacunación. Es un organismo consultivo, pero sus opiniones cuentan . Aclarará dudas éticas y, sobre todo, ayudará a entender por qué a este grupo de españoles se les permitirá el privilegio de elegir vacuna, cuando esa posibilidad está vetada para el resto. También podrá determinar cómo debe ser ese consentimiento informado. El informe tiene que estar aprobado este viernes, según ha podido saber ABC.

La comisión de Salud Pública dejó abierta el martes la posibilidad para que los afectados, que llevan meses esperando una respuesta, pudieran completar su vacunación con AstraZeneca si así lo deciden ellos mismos. Al Comité se le pregunta si es ético que se pueda ofrecer a los ciudadanos implicados , y dadas las circunstancias, la posibilidad de elegir entre una vacuna y otra.

La ministra de Sanidad confirmó ayer que «se va a abrir esta posibilidad», después de ser respaldada «mayoritariamente» por las comunidades autónomas. «Creo que es importante esta decisión, una de las más difíciles que hemos tenido que abordar. Pero creo que es una buena decisión», sentenció. Al hablar de mayorías dejó de lado el inconformismo de algunas comunidades respecto a la decisión de mezclar vacunas .

La Comunidad de Madrid reiteró en el pleno del Consejo Interterritorial su rechazo a la administración de una segunda dosis con Pfizer en base a un estudio de 600 personas (se refieren a CombiVacs, puesto en marcha por Sanidad). La región argumenta que « es imposible medir efectos secundarios con una ‘n’ tan pequeña ». Además, han pedido que si un ciudadano finalmente recibe Pfizer, firme un consentimiento informado. ABC le preguntó a Darias por qué Sanidad se empeñaba en poner la segunda dosis de Pfizer basándose solo en un estudio de 600 personas, cuando existen estudios con millones de personas que avalan AstraZeneca. Darias respondió que se trataba de una decisión de la Comisión de Salud Pública donde estaban representadas todas las comunidades. En realidad, en aquella reunión siete autonomías votaron en contra y dos se abstuvieron. No solo no hubo unanimidad, sino que las posiciones estaban bastante encontradas .

Aparte del estudio, Darias apoyó la decisión de mezclar vacunas en las pronunciaciones de la Agencia Europea del Medicamento (EMA). «La EMA, cuando ha hecho las valoraciones respecto a AstraZeneca dijo que, en cualquier caso, serían las autoridades de cada país y de acuerdo de su disponibilidad, los que tendrían que tomar la decisión. Mezclar vacunas son medidas adoptadas por Francia, Alemania, Finlandia », defendió la ministra. Además, agregó que será lo mismo que se hará cuando se tengan que poner las vacunas de refuerzo. Los fármacos «serán distintos a los que se han puesto ahora», defendió.

Por otro lado, la ministra informó de que el total de dosis será de 2,4 millones: 1,7 de Pfizer, 313.000 de Moderna, 165.000 de Janssen y 261.000 de AstraZeneca. Darias celebró como «un nuevo hito» que un tercio de la población española, más de 15 millones, ya tengan administrada al menos una dosis.

[Dosis totales por cada vacuna del coronavirus]

«Estamos dando los últimos pasos para proteger a las personas mayores, casi un 93% tiene al menos una dosis y en torno a la mitad tiene ya la pauta completa. También se está avanzando como un tiro en la inmunización de personas mayores de 50, ya que al menos el 30% tiene una dosis», dijo. Gracias a estos buenos datos de vacunación, la ministra destacó la « tendencia descendente » de la pandemia, con la incidencia bajando un 18% en la última semana. A su juicio, la buena evolución de la campaña de inmunización va a hacer posible estudiar en la ponencia de Alertas la «consideración del uso obligatorio de mascarillas en el exterior».