Las mujeres tomarán las calles de Madrid en grupos de 20

«Mañana (por hoy) habrá muchas mujeres por la calle cantando y repitiendo consignas feministas », dijo una de sus activistas, en un alegato recogido por Europa Press. La intención de la plataforma era convocar una concentración para esta tarde en la plaza de Callao de la capital con un máximo de 150 mujeres, aunque finalmente optarán por realizar actos con menos de 20 personas , cifra a partir de la cual se considera una concentración.

También la Comisión 8-M , que normalmente se sitúa a la cabecera de la manifestación de Madrid, llevó a cabo ayer varias acciones por grupos e instó a todas las mujeres a que salgan a la calle hoy vestidas de morado y muestren símbolos feministas para teñir las calles del color de la igualdad. Pero habrá quien siga adelante pese a la prohibición. El Sindicato de Estudiantes, que tiene previsto para hoy una huelga estudiantil y una concentración a las 12.00 horas a la Puerta del Sol , tiene intención de llevarlo a cabo. «El 8-M nos vemos en las calles. ¡Todas y todos a la huelga feminista y a las concentraciones!», clamaban ayer a través de redes como Twitter.

Madrid es la única autonomía donde hoy no marcharán las mujeres ni habrá concentraciones por el Día Internacional. Mientras en el resto de España se han autorizado las reuniones -con aforo reducido y controlado- la Delegación del Gobierno (amén del Ministerio Público) consideró que en la Comunidad de Madrid estos actos no se podrían llevar a cabo con la seguridad que requiere el momento sanitario actual. Y la Justicia, ayer, volvió a avalar la prohibición.

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) desestimó durante el domingo los cinco recursos que tenía pendientes -tras haber desestimado tres a diez minutos de la medianoche del sábado al domingo- interpuestos por organizaciones que habían convocado concentraciones contra la decisión de José Manuel Franco, delegado del Gobierno. Los magistrados consideraron que en los actos que se habían planteado no se pueden cumplir las medidas de seguridad para garatizar, entre otras cosas, que se pueda mantener la distancia entre los asistentes. Tampoco se dan las condiciones, expresaron, para evitar que los manifestantes se quiten la mascarilla en algún momento.

Del mismo modo, consideraron los jueces, en la situación actual el derecho de reunión entra en conflicto con la salud pública , que debe prevalecer sobre el mismo. La prohibición, resolvieron, no responde a otro tipo de razones que no sean las de salud pública. Los sindicatos UGT y CC.OO. anunciaron ayer que recurrirían la decisión ante el Tribunal Constitucional.