Pruna organiza el viernes 14 un partido de fútbol entre guardias civiles, payos y gitanos por la convivencia

El partido, en realidad, se organizó para el viernes de la feria de Pruna, pero este año han tenido que atrasarlo porque un día antes de su convocatoria, prevista para el 24 de agosto, desapareció un hombre en Algámitas y todos los efectivos de la Guardia Civil, autoridades y vecinos formaron parte del dispositivo de búsqueda hasta que al segundo día encontraron al anciano, había caído en una cañada.

El objetivo de este partido, además de recaudar fondos para la Asociación del Cáncer de Olvera (Cádiz), es dar un paso hacia la convivencia entre vecinos .

Al menos un 30% de la población de Pruna es de etnia gitana y, según el concejal de Seguridad Ciudadana, Diego Jiménez, «no siempre la convivencia ha sido buena».

El edil sabe de lo que habla porque él es gitano y ha ido en las listas del extinto Partido Andalucista en dos elecciones 2011 y 2015. Aunque reconoce que aún hay muchas «cosas que hacer» desde que él se hizo cargo del área se han dado pasos efectivos en este sentido.

Según cuentan los vecinos, «gracias a su concienzuda labor, Diego está siempre dispuesto a ayudar o a mediar en cualquier problema ».

En los años anteriores, el triangular de fútbol celebrado entre estos tres equipos, «ha sido muy divertido, el campo se llena». El primer año, Diego Jiménez participó de portero con el equipo de guardias civiles , formado por agentes de varios cuarteles de la zona –Pruna, Villanueva de San Juan, Algámitas y Olvera-.

«Y me abuchearon», tuvo entonces que quitarse la camiseta y jugar con la del equipo de su gente. Este año será en «su» equipo y dice que es el único que, de momento no ha ganado. «Llevan días entrenándose para ganar» , cuenta el edil.

Para que participaran los agentes de la Guardia Civil de la zona, tuvo que « escribir muchas cartas, incluida una a la Comandancia para pedirles permiso , y han sido muy amables con Pruna», dice el concejal.

Cada año recaudan alrededor de unos 400 euro s, incluso el primer año vendieron hasta pulseras de la asociación beneficiaria.

A la espera queda que el ambiente en esta tercera convocatoria sea igual que en las anteriores, «para que poco a poco todos podamos convivir sin problemas ».