La familia Cansino, una vida de celuloide estival

Cinema Tomares fue fundado en junio de 1964, en la calle Navarro Caro 50 por el tomareño Rafael Cansino Vega , cuyo amor por el cine le llevó previamente a fundar también el cine de invierno. Una época en la que Audrey Hepburn protagonizaba «My Fair Lady» Clint Eastwood triunfaba con «Un puñado de dólares», Sean Connery hacía de James Bond, y en España veíamos a una jovencísima Rocío Durcal en «Tengo 17 años» o a José Luis López Vázquez en «Se iba de fin de semana» y escuchábamos a Conchita Velasco cantar su «Chica Yeye».

Rafael Cansino Vega vivía para el cine, una pasión que transmitió también a sus hijos, Rafael Cansino y sus hermanas, y nietos, quienes son los que han mantenido vivo con mucha dedicación, cariño y empeño, Cinema Tomares, el último superviviente de la provincia de los antaños cines de verano.

Un negocio familiar que lleva más de medio siglo en funcionamiento y que ha sabido sobrevivir a las crisis del cine , competir con la TV, los videoclub, Internet y la expansión inmobiliaria.

Algo que ha sido posible gracias a «la entrega, cariño y esfuerzo que dedica toda la familia para que el Cine de Verano de Tomares siga adelante», destacó durante el homenaje, el alcalde de Tomares, José Luis Sanz.

«Sin cine no se entiende el verano en Tomares. Rafael y su familia han antepuesto por delante su amor por el cine a sus intereses personales, gracias a lo cual, hoy seguimos disfrutando de este gran cine que se ha convertido en una auténtica reliquia, en el único cine privado de verano que queda en la provincia, que es como tener el único museo vivo del mayor espectáculo del siglo XX y XXI, que es el cine», comentó Sanz.

Y es que a la familia Cansino la pasión por el cine le corre por las venas. Algo que llevan muy a gala pues son parientes lejanos de una de las actrices más emblemáticas y glamorosas de la historia del cine, Margarita Carmen Cansino Hayworth, más conocida como Rita Hayworth , máxima diva de Hollywood en los años 40, hija del bailarín español Eduardo Cansino Reina , natural de Castilleja de la Cuesta.

Gracias a la familia Cansino, Tomares ha podido disfrutar del mejor cine y conocer el mundo . A través de su gran pantalla de 72 metros, hemos paseado por las calles de Nueva York, París, Londres o Madrid; hemos conocido las grandes guerras o las épicas batallas de romanos; hemos vivido grandes aventuras o hemos conocido a las más grandes estrellas mundiales como Paul Newman, Marlon Brando, Sofía Loren o Grace Kelly o a actores españoles como Fernando Fernán Gómez, Alfredo Landa, Amparo Rivelles o Carmen Sevilla .

A través de Cinema Tomares, el mundo ha entrado en Tomares, y Rafael Cansino (hijo), como Alfredo en Cinema Paradiso se ha convertido en el faro que todos los veranos ha llenado la gran pantalla con los grandes estrenos de ese año.

Ubicado en un patio encalado de los mil metros cuadrados, Cinema Tomares seguirá llenándose cada verano de magia y sueños , volviendo a obsequiar a los amantes del séptimo arte con el mejor cine bajo la luz de las estrellas.

Se trata de una experiencia única en un lugar idílico , donde retrotraernos en el tiempo, asomarnos en la clásica ventanilla de taquilla para adquirir la entrada y sentarnos en las sillas de hierro azules en un microclima cinéfilo casi extinto.

Cinema Tomares cuenta además con servicio de cocina , por lo que además de disfrutar de una buena película al aire libre, los asistentes pueden cenar en los veladores dispuestos para tal fin.

Este año, Rafael Cansino ha añadido un pozo prefabricado en el gran patio , ya que como él dice, «ya que estamos en Andalucía, que se note».

En 2015, Cinema Tomares dio el salto al mundo digital , lo que supuso un cambio tremendo en su funcionamiento, pasando de la película de 35 milímetros a la tecnología en Digital 2D, que permite al público ver las películas con la máxima calidad de imagen y sonido. En definitiva, un paraíso para el cine, donde se han reproducido ya más de 2.500 películas , y las que aún quedan.