Sevilla vive su segundo día más caluroso del verano superando los 43 grados

La temperatura histórica que se registró en la capital de Sevilla el viernes, de 44.4 grados, no se superó en el día de ayer, ni se espera que se llegue a esos parámetros en los próximos días, aunque en zonas de la provincia el termómetro ha marcado una cifra cercana e incluso se ha igualado, afianzando así, un día más, la ola de calor que está azotando a la provincia de Sevilla durante este inicio de agosto. Por ello, durante el sábado la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) activó la alerta roja en la zona de la campiña por un «incremento notorio de las temperaturas»

La alerta roja que se activó en el día de ayer en la provincia dejó unas temperaturas cercana a los 45 grados en algunas zonas de la campiña, donde se produjo más calor que en la propia capital andaluza. En Fuentes de Andalucía se registró la temperatura más alta de toda la provincia, 44.4 grados, que igualó la máxima histórica desde hace 23 años, que se dio ayer en Sevilla. En Écija estuvieron toda la tarde «disfrutando» de los 42 grados durante toda la tarde (la máxima fue de 42.8). En Almadén de la Plata se llegó hasta los 33.9 de máxima

Los sevillanos que no pueden disfrutar de las vacaciones en estos momentos, están teniendo que soportar las sofocantes noches de verano que se están dando en la capital , donde el calor no da tregua ni sobrepasando la medianoche, por lo que hace casi imposible el descanso. Según afirma Emergencias Sevilla y también han relatado numerosos sevillanos en las redes sociales, la noche de ayer fue «insoportable» por el tremendo calor nocturno que hizo en todos los lugares de la provincia sevillana. En plena madrugada del viernes al sábado se ha llegado a superar los treinta grados de media, llegando a los 32.3 grados a las 00.00 en la capital andaluza , una muestra acaloradas noches que está trayendo consigo agosto.

Las previsiones para los próximos días continúan dejando unas máximas que superan los 40 grados en toda la provincia sevillana, por lo que no se espera que se vaya la ola de calor hasta el lunes. La Aemet mantiene la alerta naranja hasta el final del lunes, que se traducirá en más noches de «temperaturas significativamente altas, sobre todo en el cuadrante suroeste de la península, donde podrían mantenerse por encima de los 25ºC», por lo que seguirá siendo una tarea complicada irse a dormir, durante unos días más.

La «buena» noticia llega con los datos meteorológicos que se observan a partir del martes, donde se espera una bajada progresiva, de varios grados, tanto en las máximas, como en las deseadas mínimas para los sevillanos. Desde el martes, 7 de agosto las máximas no superarán los 40 grados , un pequeño alivio para el desierto y las mínimas se irán acercando a los 20, llegando a los 22 y 21, miércoles y jueves, sucesivamente.

Una de las circunstancias más comunes que se pueden dar antes estas condiciones meteorológicas son los famosos «golpes de calor». La Consejería de Salud de la Junta de Andalucía propone diversas recomendaciones o avisos a la sociedad andaluza para intentar reducir al máximo los posibles problemas de salud, que en algunos casos puede ser incluso mortales para aquellas personas que son más vulnerables, como las mayores de 60 años, aquellas que tienen una enfermedad crónica y los trabajadores que actúan en el medio ambiente. Siendo en Sevilla, según datos oficiales, 2.064 personas que tienen mayor riesgo de sufrirlo . Por ello, para intentar prevenirlo se recomiendan diversas medidas para intentar aliviar estos momentos de máxima calor.

Los siguientes consejos que se dan desde fuentes oficiales, no ir a la calle a la hora máxima de insolación que rondan desde las tres hasta las seis de la tarde, si es necesario salir por cuestiones de urgencia o gran necesidad, habrá que protegerse la piel con una crema además de vestirse con ropa ligera y tener siempre cubierta la cabeza con una gorra, ya que es la zona más delicada y más propensa a sufrir ante estas circunstancias. Aunque sobre todo, se debe hacer hincapié en «hidratarse continuamente durante todos los momentos del día», y mantener la casa fresca en los momentos de más temperatura.