San Julián, un espacio recuperado en Sevilla... con adoquín de Gerena

Se trata de la obra más importante que se ha llevado a cabo en los últimos años en el Casco Antiguo, y que comprende a las calles Duque Cornejo, Moravia, Juzgado y San Julián . Un barrio completo reurbanizado donde se ha reutilizado el tradicional adoquín de Gerena para separar la calzada de los bordillos, en la corriente de las calles -excepto en la plaza de San Julián- y en todo el perímetro de la puerta principal de la parroquia.

Los trabajos comenzaron tras la Semana Santa de 2019 y, aunque estaba previsto que se terminara a final de año, se han retrasado algunas semanas hasta que ya, este lunes, se ha abierto al tráfico. El alcalde de Sevilla, Juan Espadas, que ha acudido a inaugurar la zona, ha señalado que se le da «el finiquito» a «una actuación importante y excelente teniendo en cuenta su ejecución compleja con plazos largos , por los que los vecinos han tenido que aguantar molestias».

De esta forma, ha explicado que «este proyecto responde al modelo que estamos implantando en el casco histórico de la ciudad eliminando barreras arquitectónicas y generando espacios más habitables y sostenibles, tal y como ya hemos hecho en vías como Amor de Dios, San Vicente o Carlos Cañal , y seguiremos haciendo en los próximos meses». Junto a Espadas, han visitado San Julián el delegado del distrito Casco Antiguo, Juan Carlos Cabrera , y el consejero delegado de Emasesa, Jaime Palop .

La obra ha supuesto un desembolso total de 1,4 millones de euros y, en primer lugar, ha consistido en la renovación completa de las redes de abastecimiento y saneamiento y la instalación de una nueva red de riego, con la finalidad de mejorar el servicio prestado, la presión y el caudal, así como el incremento de la capacidad de captación de aguas pluviales y de evacuación y la eliminación de fugas. En total, se han sustituido 355 metros de tubería de abastecimiento y 235 metros de tubería de saneamiento, así como la rehabilitación de 195 metros de red de saneamiento mediante manga. También se han cambiado las válvulas, pozos e imbornales y se ha procedido a la reposición de la totalidad de las acometidas domiciliarias de abastecimiento (66 unidades) y de saneamiento (123 unidades). La red de riego tiene ahora una longitud de 495 metros, con 10 bocas.

Asimismo, se ha reurbanizado por completo la zona. Las calles disponen ya de plataforma única, generando un entorno más accesible y habitable y sin barreras arquitectónicas , cumpliendo así con los objetivos definidos en el Plan Municipal de Accesibilidad. En total, se ha intervenido sobre 3.700 metros cuadrados. Por primera vez en esta actuación se ha usado una solución que ha permitido una reutilización en algunos tramos de la calle del adoquín de Gerena procedente de la demolición. Se ha hecho donde ha sido posible quedando como testimonio con una línea en el centro de las vías o un tramo concreto.

Estos criterios de accesibilidad no contemplan la reutilización del adoquín de Gerena en las calles pese a que desde sectores conservacionistas se reclama al Ayuntamiento que se respete esta seña de identidad estética de la ciudad. Su rugosidad, según apuntan los técnicos municipales, no es compatible con la normativa de accesibilidad. Y, si se pulieran estos adoquines para hacerlos lisos, el coste de las obras se dispararía. Pese a ello, se ha mantenido en algunas partes del trazado de las vías en San Julián donde no afecte ni a los peatones ni a la circulación de los vehículos, ya que es más ruidoso.

Por su parte, en la plaza de San Julián se ha realizado una plantación de ocho nuevos árboles, de la especie «Sophora Japónica» , que se enmarcan dentro de la campaña de plantación de arbolado 2019-2020 que tiene programadas la plantación de más de 5.000 ejemplares en toda la ciudad. Por su parte, en la calle Moravia se ha incorporado una nueva zona de juego infantil que, además, tiene juegos infantiles inclusivos cumpliendo así también con los objetivos del plan de accesibilidad.