Ryanair quiere reanudar los vuelos desde Sevilla a partir de julio

Los planes del grupo irlandés, que está sujetos a las condiciones de cada gobierno, suponen un importante estímulo para el aeropuerto de Sevilla , del que es su principal operador, con casi medio centenar de rutas, que se elevarían a 54 a partir de la primavera si no hubiera ocurrido la crisis del Covid-19 . Entre los destinos que ha vuelto a comercializar desde San Pablo están Berlín (Schönefeld), Colonia, Dusseldorf, Frankfurt, Memmingen y Stuttgart, en Alemania ; Viena, en Austria; Bruselas (Charleroi y Zaventem), en Bélgica; Barcelona-El Prat, Gran Canaria, Ibiza, Lanzarote, Palma, Santiago, Tenerife Sur, Valencia y Vitoria, en España ; Burdeos, Marsella, Nantes, París (Beauvais) y Toulouse, en Francia ; Budapest, en Hungría ; Dublín, en Irlanda ; Catania, Bérgamo, Milán Malpensa, Pisa, Roma Fiumicino y Venecia Treviso, en Italia ; Marrakech, en Marruecos ; Luxemburgo ; Malta ; Eindoven (Holanda); Cracovia y Varsovia, en Polonia ; Oporto, en Portugal ; Bristol, Edimburgo, Londres (Luton y Stansted) y Manchester, en Reino Unido .

La mayoría con uno y dos vuelos por semana, un ritmo muy inferior al de antes de la crisis en destinos como Italia y Gran Bretaña, según la programación que tiene a la venta a través de su página web. La compañía recuerda que desde mediados de marzo, cuando se aplicaron las restricciones de vuelos a causa del Covid-19, ha estado operando 30 vuelos diarios entre Irlanda, el Reino Unido y Europa. A partir del 1 de julio, Ryanair volverá a volar desde la mayoría de sus 80 bases europeas . Habrá menos frecuencias diarias/semanales en las principales rutas, mientras se sigue trabajando para restablecer sus servicios en el mayor número de rutas posible, en lugar de operar menos conexiones, pero con más frecuencias.

Con motivo de su regreso a los cielos, la compañía ha publicado un vídeo que puede verse en este enlace o a través de su página www.ryanair.com. La aerolínea informa y anima a los pasajeros a seguir las medidas sanitarias efectivas para limitar el Covid-19. Entre estas medidas, destacan la reducción del número de bolsas facturadas, la facturación online, la descarga de la tarjeta de embarque en el teléfono del pasajero, así como la realización de controles de temperatura a la entrada del aeropuerto y el uso de mascarillas y otros sistemas de protección facial tanto en la terminal como a bordo de los aviones.

Todas las aeronaves de Ryanair están equipadas con filtros de aire HEPA (similares a los que se emplean en las salas de emergencia de hospitales) y todas las superficies interiores de los aviones se desinfectan todas las noches con productos químicos, eficaces durante más de 24 horas . Si bien los controles de temperatura y las mascarillas o sistemas de protección facial son la clave para lograr una vuelta a las operaciones de forma segura, también se fomentará el distanciamiento social en los aeropuertos y a bordo de los aviones siempre que sea posible .

En el interior de las aeronaves, la tripulación de cabina de Ryanair llevará mascarillas o protectores faciales y durante el vuelo se ofrecerá un servicio limitado de catering con bebidas y aperitivos preenvasados, sin aceptar pagos en efectivo y siendo todas las transacciones a bordo sin dinero en efectivo. También se prohibirá hacer cola para ir al baño a bordo , aunque se facilitará el acceso al baño a los pasajeros que lo soliciten de forma individual. Ryanair recomienda a los pasajeros a lavarse las manos regularmente y a utilizar desinfectantes de manos en las terminales de los aeropuertos.

Como medida adicional temporal de salud pública, y conforme los diferentes países de la Unión Europea van saliendo del confinamiento a causa del Covid-19, Ryanair exigirá a todos los pasajeros que vuelen en julio y agosto completar un formulario con los detalles (en el momento de la facturación) de la duración de su visita , así como su dirección mientras visitan otro país de la Unión Europea, y esta información de contacto se facilitará a los gobiernos de la Unión Europea para ayudarles a vigilar las normas de aislamiento que exijan a los visitantes de los vuelos intracomunitarios.