Sevilla aspira a salvar 15 eventos del calendario previsto para 2020

En total, son al menos 15 los grandes eventos que a partir de ese 25 de junio puede acoger Sevilla en 2020 garantizando las medidas que dispongan las autoridades sanitarias. Desde el Ayuntamiento de Sevilla se ve muy lejos la recuperación de los eventos multitudinarios como se celebraban hasta ahora y no sólo no se garantiza que la Velá de Santa Ana -de finales de julio- se vaya a llevar a cabo sino que se ve como un imposible a pesar de no haber tomado aún la decisión de cancelarla.

De cara a la fase 3 (del 8 al 25 de junio), los eventos público se pueden celebrar con un aforo máximo de 800 personas al aire libre, sentadas y guardando dos metros de separación. Esto es incompatible con los conciertos como los de Marc Anthony o Manuel Carrasco , que se deben celebrar en el Olímpico el 25 de junio y el 19 de septiembre respectivamente. Ambos conciertos, a los que se le suman otros aún sin fecha tras el aplazamiento como el de Chayanne o Extremoduro , han vendido ya todas sus entradas. Si hubiera que guardar los dos metros de distancia social, el aforo pasaría de los 60.000 habituales en este estadio a un número muy inferior. ¿Es posible su celebración? Sí, pero el espectáculo sería mucho menos multitudinario y habría que devolver gran parte de las entradas. Todo apunta a que se suspenderá.

En cuanto al concierto de Vanessa Martín en el teatro de la Maestranza, aplazado en marzo al 14 de junio, la situación es aún más complicada. Para esa fecha y en ese espacio sólo podrían acceder 100 personas según establecen las directrices para la fase 3. En caso de celebrarse, lo que parece muy improbable, no podría tener consideración de gran evento.

Sí parece más probable la celebración de la Bienal de Flamenco , del 4 de septiembre al 4 de octubre. Fuentes municipales señalaron a ABC que el Ayuntamiento está trabajando en varios escenarios y reprogramando los contenidos. En principio, se mantiene pero se está definiendo cómo hacerlo. Este evento sí es factible al ser en salas con el público sentado, lo que garantiza un mayor control del aforo, y también por el hecho de que tiene lugar más de dos meses después de la llegada de la «nueva normalidad» pregonada por el Gobierno, tras un mes de agosto en el que las playas y los eventos que allí se puedan realizar marquen una línea a seguir.

De la decisión y posible experiencia con la Bienal se decidirá qué hacer con la programación cultural del teatro de la Maestranza y, también, se estudiará cómo se podrá celebrar el festival Interestelar , que es al aire libre, por lo que podrían acudir más personas pero donde es más difícil establecer mecanismos de control de medidas de seguridad.

Mucho más difícil lo tiene la Velá de Santa Ana . Desde el Consistorio evitan aventurarse a tomar una decisión, pero son conscientes de que controlar el aforo y las medidas de seguridad en este gran evento es casi imposible. Limitar el número de personas en las casetas no es tan complicado como evitar la concentración de personas en la calle.

En cuanto al deporte, además de los partidos de Betis y Sevilla está por fijar la final de la Copa del Rey entre el Athletic y la Real, que apuestan por celebrarla con público. No parece probable que estos encuentros tengan lugar si se mantienen las restricciones sociales.

Por su parte, las procesiones extraordinarias y las de gloria serán la gran prueba de fuego antes de la Semana Santa de 2021 , y el horizonte en el que las hermandades deben empezar a mirar en el caso de que no hubiera vacuna o tratamiento eficaz. El Arzobispado ha dejado claro que no habrá cultos externos mientras se mantengan las restricciones. En julio la ciudad acoge las procesiones a la Virgen del Carmen y, en agosto, la V irgen de los Reyes , que es la primera multitudinaria. De ahí saldrá la hoja de ruta a seguir por el Cerro (final de septiembre), la Lanzada y el Carmen (noviembre). Pero, sobre todo, lo que marcará la evolución del asunto en lo referente a eventos religiosos será el traslado del Gran Poder a Tres Barrios entre octubre y noviembre. En la hemandad no tomarán ninguna decisión hasta bien avanzado el verano, pero tienen claro que el Señor, si va, es para encontrarse con los devotos.