Blas Ballesteros cobró de Aljarafesa, Emasesa y la Diputación siendo cónsul de Brasil

El cargo de cónsul honorario no está retribuido, por lo que puede compaginarse con otro trabajo. Normalmente, los cónsules ejercen profesiones liberales, como empresario, la abogacía, etcétera. A la hora de nombrar a sus cónsules honorarios, el estado brasileño sólo pone una condición a los candidatos: no ser políticos ni funcionarios ni ejercer un cargo público en alguna administración . Sólo en algunas ocasiones ha hecho excepciones con funcionarios que eran catedráticos de universidad o profesores, según fuentes solventes consultadas por ABC.

Pues bien, Blas Ballesteros parece haber hecho caso omiso a esa premisa, ya que fue nombrado cónsul honorario en diciembre de 2009 y desde entonces hasta su destitución en abril de 2016 ha percibido remuneraciones de la Diputación de Sevilla y dos empresas públicas de abastecimiento de agua participadas por ayuntamientos: Emasesa y Aljarafesa.

El exconcejal del PSOE trabajaba en la (rebautizada como Fundación DeSevilla) cuando en 2007 solicitó una excedencia para ser asesor jurídico de Emasesa, una empresa supramunicipal presidida por Alfredo Sánchez Monteseirín , alcalde de Sevilla.

En 2012, el socialista volvió a cobrar un sueldo de una empresa pública, como es Aljarafesa, presidida desde 2003 por Fernando Rodríguez Villalobos , a la sazón también presidente de la Diputación y uno de los hombres de confianza de Susana Díaz . Aljarafesa es propiedad de la Mancomunidad de Municipios del Aljarafe, a su vez formada por ayuntamientos de la provincia. Allí recaló en octubre de 2012 como «colaborador institucional» en representación del PSOE y con un sueldo anual de 44.000 euros brutos anuales. Su trabajo era presuntamente de asesoramiento e intermediación entre los municipios para evitar conflictos entre ellos pero la verdad es que allí nadie le vio ir a su trabajo con frecuencia . El chollo le duró hasta septiembre de 2015, cuando la Ley de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración prohibió ese tipo de contratos.

Cinco meses después de quedarse sin trabajo en Aljarafesa, Fernando Rodríguez Villalobos, volvió a salir en su auxilio contratándole en febrero pasado como asesor, con un sueldo de 3.000 euros mensuales . El Consulado General de Brasil en España destituyó a Ballesteros por esas incompatibilidades y críticas de brasileños por la falta de diligencia de Ballesteros en el desempeño de su trabajo como cónsul. A pesar de ello, Fernando Rodríguez Villalobos, presidente del Consorcio Provincial  de Aguas, ha vuelto a contratarle como gerente de ese organismo, esta vez con un suelo de 69.000 euros, más de lo que gana la presidenta de la Junta.

Además, en el consulado de Brasil en Sevilla trabajó como vicecónsul hasta 2011 Enrique Soria Rubiano , cuñado de Ballesteros , como admite él mismo en una red social. Soriano estaba además muy vinculado a la Institución Empresarial Brasil-Andalucía, presidida por su cuñado, y fue patrono de la Fundación por el Progreso de Andalucía, entidad afín al PSOE e inmersa el escándalo de los cursos de formación.