El arzobispo nombra a Moeckel asesor del delegado episcopal para El Salvador
Monseñor Carlos Amigo Vallejo también ha nombrado asesor técnico del delegado episcopal para la misma causa al arquitecto Fernando Mendoza Castell
SEVILLA. El abogado Joaquín Moeckel ha recibido ya la notificación de su nombramiento como asesor jurídico y económico del delegado episcopal para la rehabilitación de la parroquia del Salvador. Ayer por la tarde, el ex hermano mayor del Baratillo no ocultaba su alegría por ese ... nombramiento, por el honor que le supone, ya que viene a reconocer la iniciativa que tuvo cuando, nada más decretarse el cierre de la iglesia del Salvador, al encabezar una recogida de fondos económicos con los que hacer frente a la rehabilitación del monumental templo.
El acta de nombramiento señala que el decreto firmado por el arzobispo obedece a la nueva situación creada en la antigua colegiata, «debido a las graves patologías que afectan a la estructura del edificio, que nos ha llevado al cierre definitivo del templo hasta que se realice la restauración del mismo».
Con el fin de sacar adelante la rehabilitación, «recabar ayudas de las administraciones públicas, canalizar el movimiento ciudadano a favor de ese proyecto, actuar en todos los procesos administrativos para el desarrollo de la obra, controlar las cuentas y resolver cuantas incidencias tengan lugar en relación con ese asunto y oído el parecer de los órganos de gobierno» monseñor Amigo nombra a Joaquín Guillermo Moeckel Gil asesor jurídico y económico de la Delegación Episcopal para la restauración de la antigua Colegiata del Divino Salvador de Sevilla y a Fernando Mendoza Castells, asesor técnico de la misma Delegación Episcopal.
Para la rehabilitación del templo del Salvador ya se había nombrado delegado episcopal al canónigo Juan Garrido Mesa que a partir de ahora contará con el apoyo de Moeckel y Mendoza.
El ex hermano mayor de la Corporación del Miércoles Santo comentaba ayer que aceptar ese cargo supone además de un honor una satisfacción personal porque tanto el arzobispo designándolo como él aceptándolo ponen de manifiesto que «se puede discrepar y sin embargo colaborar». Como se recordará, Moéckel mantuvo, siendo hermano mayor del Baratillo, discrepancias con el arzobispo sobre la aplicación de las normas diocesanas.
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