El 'sinpa' de Pedro Sánchez que puso en un aprieto a Miguel Ángel Revilla: «Pasé un momento muy jodido»

Revilla sopló las velas e hizo una reflexión. «80 año es uno más que 79, pero no lo mismo. Es una cifra redonda. Antes de 80 palman el 50% de los españoles. Entonces empiezas a reflexionar. Hasta ahora no había mirado hacia atrás. Y he llegado a la conclusión de que estoy contento conmigo mismo porque he luchado por unas ideas y las he visto realizarse. Llevo 40 y tantos años consagrándome a mi vocación de poner Cantabria en el mapa».

Echando la vista atrás, el cántabro repasó su trayectoria hasta llegar a la política, como ya hiciera también en 'Joaquín, el novato' . «Pasar de todo a no tener nada», explicó. También detalló el episodio más difícil de su infancia, el 'bullying' que sufrió en el colegio.

Además, dispuesto a dar mucha guerra, presentó en primicia en 'El Hormiguero' la biografía 'Toda un vida' . A Motos le llamó la atención que en el libro, le dedica un capítulo a Pedro Sánche z que lleva por título 'El día que Pedro se olvidó de pagar', donde relata una anécdota que ahora se toma a risa, pero que en su día le hizo «pasar un momento muy jodido».

Se remontó a la época en la que el actual Presidente del Gobierno acababa de ser elegido Secretario General del PSOE, contra todo pronóstico. La campaña de desprestigio hacia él, recordó Revilla había sido general en todos los medios de comunicación. «Probablemente él ganó las elecciones porque yo hice mucho trabajo defendiéndole», comentó el invitado.

Sumamente agradecido por el apoyo, Sánchez quiso tener un detalle con él y con su mujer invitándolos a comer en un restaurante. «A las 16:30 me dice 'salgo yo primero', con muy buen criterio, para que no nos hicieran una foto», contó el invitado, apuntando entre risas que no lo hará más.

El momento delicado sucedió 10 minutos después. «Me tomo el café, un chupito, y salgo tranquilamente. Cuando estaba casi en la puerta, oigo que me llamaban. Dije 'coño, una foto que me piden'. Pero no, veo que vienen agitando una cosa blanca… Y no, no era una servilleta. Era la factura. Se fue sin pagar. 98,50 euros», agregó.

Eso sí, el cántabro rompió una lanza a favor del Presidente. «Hay dos opciones: o se le olvidó, o esta gente está en un nivel que es un honor que vengas a comer y pagues tú. El Emérito no pagaba en ningún lado».