¿Será capaz Juego de tronos de hacer encajar todas las piezas en una temporada tan corta?

Si bien es cierto que la sexta entrega cerró bastante el devenir de las tramas desarrolladas, aún quedan algunas misterios más por resolver. Bran sin su escudero Hodor tendrá que hacer frente a los Caminantes Blancos, que van en su busca; Sansa Stark mira cada vez con más recelo a su hermano Jon Nieve , y una disputa fraternal es más probable que nunca; la imparable venganza de Arya o un reencuentro con el resto de su familia...

Pero hay vida más allá de los Stark, sobre todo en «Juego de tronos» . Un encontronazo entre los hermanos y amantes Jamie y Cersei amenaza con desatarse, y las consecuencias podrían ser devastadoras. Daenerys y su ejército están a punto de llegar a Poniente y se ha filtrado la vuelta de el regreso de Gendry, por lo que su trama tendrá que solucionarse tarde o temprano.

Todo apunta a que, a pesar de estar más concentradas en el tiempo, las tramas de estas dos últimas temporadas serán más decisivas que las desarrolladas en las anteriores . Sobre todo porque una ficción tan aclamada como «Juego de tronos» no puede permitirse dejar cabos sueltos en su desenlace. El problema es que, recortar el número de episodios en las dos últimas temporadas que quedan por emitirse puede abocar a una resolución precipitada o inconclusa. ¿Quién ganara, fuego o hielo? ¿Tendrán más protagonismo los dragones? ¿Sabremos más de la historia de los Caminantes Blancos? ¿Abordarán la línea marcada por George R.R. Martin en las novelas o seguirán forjando un camino propio? Por desgracia, hasta su estreno, seguiremos con la incógnita.

Y los antecedentes no son nada halagüeños. Sobre todo teniendo en cuenta que los creadores de la serie se han tomado su tiempo para explicar ciertas situaciones, muchas veces sin el éxito esperado . Sin ir más lejos, Bran estuvo una temporada sin siquiera aparecer, y cuando regresó lo hizo convertido en alguien tan diferente que el cambio impactaba y en ocasiones parecía incomprensible, una elipsis demasiado amplia, en la que se perdían muchos detalles del personaje; algo similar sucede con Arya, para cuyo desarrollo han dedicado sangres, sudor y lágrimas desde el comienzo de «Juego de tronos» , y aún dará más de sí. Ha habido muertes precipitadas y otras que se demoraron más de la cuenta... Y todo eso durante seis temporadas de diez capítulos.

Pero es posible que para terminar por todo lo alto, una ficción a la altura de «Juego de tronos» se haya reservado la mayor parte de su potencial para el final. Y si todo sale bien, ya se sabe lo que recomienda el dicho: «Lo bueno, si breve, dos veces bueno» .