Los desnudos que «sacaron» a Ruth Wilson de «The Affair»

La razón por la que no podía hablar entonces era por un acuerdo de confidencialidad con la productora de la serie. Y la razón del abandono, según ha podido saber ahora «The Hollywood Reporter», tuvo que ver con un ambiente de trabajo hostil . Sobre todo, por un aspecto característico de la serie: los desnudos.

Al parecer, Wilson parecía cada vez más incómoda con la evolución del personaje y con las crecientes exigencias de que apareciera desnuda en pantalla. La actriz cuestionaba por qué tenía que aparecer sin ropa en escenas donde no había necesidad alguna o por qué no se imponían las mismas exigencias para los compañeros masculinos.

En el centro de roces estaba la creadora de «The Affair», Sarah Treem, a la que ahora se acusa de presionar a los actores -sobre todo a las actrices- para que aparecieran desnudas. «Una y otra vez, fui testigo de cómo Sarah Treem trataba de camelar a los actores para que se desnudaran, incluso si se sentían incómodos con ello o si su contrato no les obligaba a hacerlo», explicó a la revista especializada una fuente anónima que participó en la producción.

Otros detalles hacían incómodos los rodajes a Wilson y otros actores: la presencia, durante las escenas de sexo, de gente que no tenían que ver con la producción. La figura del « coordinador de intimidad », un responsable de que los actores estén cómodos durante escenas sexuales que ha ganado popularidad con el movimiento «MeToo», no apareció en la serie hasta su última temporada.

La toxicidad en el set se vio en un incidente en el que participó Lena Dunham , la actriz y creadora de «Girls». Dunham, la producotra Jenni Konner y parte del reparto de «Girls» coincidieron en un restaurante con Jeffrey Reiner , que ha dirigido muchos capítulos de «The Affair». El director, embriagado -según relataron después Dunham y Konner en su blog- les llegó a pedir que convencieran a Wilson de que «enseñara sus tetas o al menos algo de vagina».

Una de las características de «The Affair» es que cuenta la misma historia desde dos puntos de vista. Y eso es lo que ha pasado con el episodio de la salida de Wilson. Tras el artículo de «The Hollywood Reporter», Treem ha publicado una tribuna en «Deadline» en la que asegura que siempre trató de «proteger» a Wilson y rodar escenas de sexo «con seguridad y respeto », niega la hostilidad en el set y aduce que la actriz simplemente estaba «en desacuerdo con las elecciones del personaje».