Muere Donald Sutherland, icono del Hollywood rebelde y ganador del Oscar de honor

Para la historia queda su recuerdo y el de sus personajes, del capitán 'Hawkeye' de 'M.A.S.H.' (Robert Altman, 1970), al Jesucristo de 'Johnny cogió su fusil' (Dalton Trumbo, 1971), el investigador privado de 'Klute' (Alan J. Pakula, 1971), el profesor de 'Desmadre a la americana' (John Landis, 1978), el atormentado padre de familia de 'Gente corriente' (Robert Redford, 1980) o el héroe veterano de 'Space Cowboys' (Clint Eastwood, 2000). Hay más, claro, una lista inagotable de cineastas que son historia del cine y a los que aportó su plano y su contraplano, su gesto de villano y su mueca de bonachón.

Si hacer una lista sirviera para demostrar algo, una en la que aparecieran Federico Fellini (y su 'Casanova', 1976), Bernardo Bertolucci ('Novecento', 1976), Oliver Stone ('JFK', 1991), Robert Aldrich ('Doce del patíbulo' 1967), Philip Kaufman, ('La invasión de los ultracuerpos', 1978), Ron Howard ('Llamaradas', 1991), Fran Rubel Kuzui ('Buffy, la cazavampiros', 1992), Barry Levinson ('Acoso', 1994), Joe Shumacher ('Tiempo de matar', 1996), Anthony Minghella ('Cold Mountain', 2003), Joe Wright ('Orgullo y prejuicio', de 2005), James Gray ('Ad Astra', 2019) demostraría que Sutherland tuvo tiempo en seis décadas para codearse con los más grandes. Y si los premios sirvieran para demostrar la grandeza de algo, las cero nominaciones con las que la Academia de Hollywood le castigó solo servirían para retratar a sus miembros. Al menos, en 2018, le dieron el Oscar de honor. No se dejó deslumbrar por el glamur de las alfombras rojas y prefirió buscar entre las esquinas de Sunset Boulevard a aquellos cineastas que tenían más cosas que contar.

Noticia Relacionada

«Mank», el turbulento viaje de David Fincher hasta desenterrar a su «Rosebud»

Gary Oldman protagoniza la cinta nominada al Globo de Oro a Mejor película

Porque Sutherland fue un actor a contracorriente, alguien que se ganó un hueco en Hollywood a fuerza de tesón para, al final, renunciar a todo lo que no le generara el placer de la interpretación. «No sé nada de Hollywood... Vivo en Miami, en Canadá, en Francia... No trabajo allí», llegó a decir, aunque su nombre nunca desapareció de los carteles de los grandes estudios. Quizá por ese desdén hacia lo más frívolo del cine, sus ganas de trabajar nunca desaparecieron. Tanto que en 2023 llegó a trabajar en tres proyectos. La jubilación nunca atravesó su mente: «No me puedo jubilar porque mi vida es el trabajo. Esto es una pasión. Los personajes que he interpretado me han dado disfrute y libertad para vivir la vida que nunca me hubiera atrevido a vivir».

Unas vidas ajenas que encontró también en la televisión, en series míticas como 'El Santo' (1965) o 'Los Vengadores' (1967). Ganó el Emmy con 'Ciudadano X' (1995) y el Globo de Oro por 'Camino a la guerra' (2002). En sus últimos años dio vida a Paul Getty en 'Trust', (2018, serie de Danny Boyle) y acompañó a Nicole Kidman en 'The Undoing'. Su último trabajo, el que cierra su filmografía, es precisamente para la pantalla pequeña: 'Hombres de ley: Bass Reeves'.

«Con gran pesar les digo que mi padre, Donald Sutherland, ha fallecido. Personalmente, me parece uno de los actores más importantes de la historia del cine. Nunca le amilanó un papel, bueno, malo o feo. Amaba lo que hacía e hizo lo que amaba, y nunca se puede pedir más que eso. Una vida bien vivida», escribió Kiefer en la nota con la que informaba de la muerte de su padre.

Noticia Relacionada

La erótica confesión de Donald Sutherland sobre Jane Fonda

Antonio Albert

50 años después, el actor se atreve a dar el paso sin temor a represalias

Una vida de 88 años que equivalen a tantas vidas, a tantas historias, que hacen del recuerdo de Donald Sutherland un reguero de rostros de personajes. Una trayectoria exprimida hasta el final, donde no dejó de pasárselo «maravillosamente bien» en los platós de cine. No está mal para alguien que llegó a reconocer que, cuando empezó, no tenía más intención que «ser un actor de teatro».