No solo a la plancha: así preparo las alcachofas cuando quiero que tengan más sabor

El secreto para que las alcachofas tengan un sabor intenso y delicioso está en la forma de cocinarlas y en los ingredientes con los que las acompañamos. Una buena técnica es cocerlas previamente con hierbas aromáticas como el laurel y el tomillo. Esto potenciará su gusto natural. Además, combinarlas con otros ingredientes como jamón, mariscos o salsas cremosas puede hacer que su sabor sea aún más espectacular.

Las alcachofas al horno, por ejemplo, son una opción ideal si buscas un resultado crujiente por fuera y tierno por dentro. También puedes optar por hacer alcachofas fritas y rebozarlas o incorporarlas a guisos y arroces para que absorban todos los matices de la receta.

Además, hay muchas formas de conservar su frescura y sabor. Si compras alcachofas frescas, es recomendable cocinarlas lo antes posible para evitar que se oxiden. Una opción práctica es sumergirlas en agua con limón antes de cocinarlas.

Si optas por utilizar alcachofas en conserva, puedes enjuagarlas ligeramente para eliminar el exceso de sal o vinagre, según su preparación, y listo.

Si quieres variar tu repertorio y darle más sabor a las alcachofas más allá de cocinarlas a la plancha, aquí tienes algunas ideas:

Alcachofas rellenas: Prepáralas con gambas, bechamel y jamón o incluso haz unas alcachofas rellenas gratinadas con queso para un toque cremoso e irresistible.

Guisadas y estofadas: Combinadas con guisantes, bacon o incluso unas alcachofas con patatas y mollejas de pato, resultan muy tiernas y llenas de sabor.

Con mariscos y pescado: El arroz con alcachofas y rape o las alcachofas con almejas y chipirones son opciones que destacan por su equilibrio de sabores.

En cremas y salsas: Las cremas de alcachofas o las combinadas con espárragos son una excelente alternativa si buscas una textura suave y un gusto refinado.

Al horno o fritas: Gratinar los corazones de alcachofa con gambas y queso o freír las alcachofas con un toque de miel son maneras sencillas de convertirlas en una delicia crujiente.

En pastas y arroces: También puedes combinarlas con espaguetis, macarrones o incluso hacer alcachofas con arroz y sepia para un plato completo y lleno de matices.

Las alcachofas también se pueden preparar en recetas tradicionales como la barigoule francesa, donde se guisan con vino blanco y hierbas aromáticas, o en recetas mediterráneas como las alcachofas con piñones y uvas pasas, que combinan sabores dulces y salados de manera espectacular.

Para que puedas disfrutar de este alimento de mil maneras diferentes, hemos recopilado 39 recetas con alcachofas. Te harán olvidar que esta verdura sólo se puede cocinar a la plancha. Desde estofados y guisos hasta platos gratinados, fritos o con pasta, hay opciones para todos los gustos. Descúbrelas a continuación y atrévete a experimentar en la cocina con este ingrediente tan especial.