La vida personal de Manuel Torreiglesias: un pionero de la salud en televisión que espera riñón a los 83 años
Fue el mítico presentador de 'Saber Vivir' y ahora dedica tres días a la semana a sesiones de diálisis
Una vez dejó el medio apenas concedió entrevistas y desapareció de la escena pública
Máxima preocupación por la salud de Isabel Pantoja
Muchos se acuerdan todavía de aquel emblemático programa de televisión que 'Saber Vivir', donde se enseñaba a los españoles a adoptar buenos hábitos de vida y salud. El rostro de aquel espacio era Manuel Torreiglesias, un pionero, y hoy clama por un riñón ... nuevo a sus 83 años.
Para él, siempre tan preocupado por la salud, la edad no es una barrera, sino más bien al contrario. Ha decidido ponerse en la lista de espera para encontrar un órgano que le permita quitar las más de tres horas y media que le dedica a la diálisis durante tres días a la semana. El mítico presentador considera que su perfil es idóneo para un trasplante de riñón.
Fue un 8 de enero de 1997 cuando ‹Saber Vivir' debutaba en la parrilla de televisión, que entonces era muy diferente a la de ahora. Los programas de salud no se desplazaban a horarios clandestinos y, muy al contrario, ocupaban franjas de prime time. Manuel Torreiglesias pondría cara, voz y alma a aquel espacio que se emitiría en TVE durante 12 años. Todo un emblema de la televisión.
De la osadía al éxito
Parecía una decisión osada, pero la audiencia respaldaría a 'Saber Vivir' de principio a fin. Era un magacín sobre salud y hábitos de vida que se emitía, como decían los clásicos, «en riguroso directo» de lunes a viernes y abordando todo tipo de temas.
Durante la primera temporada, el programa fue presentado por Manuel Torreiglesias junto a una todoterreno de la televisión, Teresa Viejo, y tras la marcha de ésta continuaría como director y presentador en solitario. La aventura duraría hasta el 7 de mayo de 2009, cuando la cadena le sustituyó por Luis Gutiérrez. El director en la actualidad es Alfonso García Gutiérrez y el programa se emite semanalmente.
Manuel Torreiglesias se despidió de la audiencia el 7 de mayo de 2009, no sin polémica. Ese día fue despedido y el programa quedó cancelado por «incumplir algunas normas básicas de la cadena relativas a la inserción de espacios de publicidad en los programas». Hace tiempo que se hablaba de ello y el ente público inició una investigación interna con el fin de esclarecer los hechos, si bien nada trascendió de las pesquisas y el asunto quedó más o menos tapado.
Manuel Torreiglesias, herido en su orgullo, decidió dar una rueda de prensa para mostrar su disconformidad: «Después del programa, el director de TVE me comunicó el despido por motivos que en absoluto comparto. Por lealtad le dije que iba a guardar silencio, que iba a desaparecer para no tener que responder a los medios de comunicación».
Micrófono de Oro y Antena de Oro
Su vida había sido la televisión y todo cambió para él a partir de ese instante. Muy duro para un hombre que tiempo atrás se había diplomado en Magisterio y posteriormente en Filosofía por la Universidad de Salamanca. Sería en 1964 cuando llegaría a Madrid para dedicarse a la docencia, aunque la vida le depararía un destino bien diferente cuando Eugenio Pena lo llamó para trabajar junto a él como ayudante de realización en el concurso 'Cesta y puntos'. En 1968 se licenció en Medicina en la Universidad Complutense de Madrid para completar su larga lista de capacidades. El resto es historia.
Tras su turbia salida de TVE, se puso al frente de '+Vivir' en la cadena Intereconomía. Duró hasta febrero de 2013, momento en que Manuel Torreiglesias rescindió el contrato. Fue su último trabajo para televisión. A lo largo de su vida publicaría siete libros y sería premiado con un Micrófono de Oro y una Antena de Oro.
En una de las pocas entrevistas que daría en los últimos años, para 'La Voz de Galicia' mostraría su desencanto con la profesión: «Sólo quieren jóvenes, se apuesta por lo guapo y lo atlético». Y añadiría: «Los que tenemos mi edad, parecer ser que no lo tenemos fácil para encontrar sitios donde poder hablar». Sobre su vida privada, casi nada se conoce: casi todo queda en su apreciada intimidad mientras reclama un riñón.
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete
Esta funcionalidad es sólo para suscriptores
Suscribete