Salen a la luz las últimas horas de Liam Payne: 13 botellas de whisky, 13 gramos de cocaína y dos prostitutas

Lo que comenzó como un viaje aparentemente tranquilo en Argentina se convirtió en una noche de excesos que culminó en tragedia. Según 'TMZ', el 15 de octubre, un día antes de su fatal accidente, Liam realizó varios pedidos de alcohol que reflejan un estado de ánimo perturbado. En la noche solicitó cuatro botellas de whisky, y a tan solo ocho horas después, hizo otro pedido de cinco botellas más. Sin embargo, el alcohol no fue lo único que consumió esa noche.

A medida que la investigación avanzaba, salió a la luz que el cantante también había solicitado sustancias ilegales en lo que parecía una espiral de autodestrucción. Según el medio estadounidense, Liam había pedido a un empresario argentino seis gramos de cocaína, una solicitud que fue cumplida rápidamente. Pero las sorpresas no terminan ahí. El mismo empresario fue quien más tarde pagó a dos prostitutas que llegaron a la habitación de Liam, quienes aseguraron que el cantante se negó a abonarles por sus servicios. En medio de esta confusión, Liam también pidió siete gramos adicionales de cocaína a un empleado del hotel.

La autopsia reveló que el cuerpo de Liam Payne estaba impregnado de un cóctel letal de drogas: crack, cocaína, metanfetamina, ketamina, MDMA y benzodiazepinas. La combinación de estas sustancias provocó un estado de inconsciencia en el artista, quien finalmente perdió el control y cayó desde la ventana del tercer piso del hotel. Las heridas y hemorragias internas que sufrió debido a la caída fueron fatales.

Lo que parecía ser un trágico accidente se ha convertido en una historia de excesos, escándalos y caos en las últimas horas de la vida de Liam. Su familia y amigos, devastados por la pérdida, han tenido que enfrentar la dura realidad de que su ser querido estaba luchando con problemas mucho más profundos. Kate Cassidy, la pareja de Liam, expresó su dolor a través de un mensaje desgarrador: «Mi corazón está destrozado de una manera que no se puede expresar con palabras. Eres tan increíblemente amado, y ahora estoy luchando por vivir sin ti», dijo, visiblemente afectada.

Mientras tanto, la banda One Direction, que compartió con él momentos inolvidables durante años, se ha reunido para rendirle homenaje en su despedida. Aunque la tragedia ha dejado una profunda herida, también ha sido un recordatorio de lo que ocurre detrás de las cámaras, donde la fama no siempre es suficiente para ocultar los tormentos internos de aquellos que la viven.

El triste final de Liam Payne deja en claro que, a pesar de su éxito, sus últimos momentos estuvieron marcados por una espiral de abuso de sustancias que acabó con su vida. Un recordatorio de las sombras que, a menudo, acompañan a aquellos que parecen tenerlo todo, pero que luchan en silencio contra sus propios demonios.