El Reino Unido cree que China y Rusia alimentaron la campaña de difamación contra Kate Middleton

Y es que el anuncio del diagnóstico de cáncer de la futura Reina el pasado viernes desató un nuevo torrente de ataques en las redes sociales. El primer ministro Rishi Sunak, entre otros líderes políticos, condenó enérgicamente la conducta de los trolls de internet, cuyos ataques no cesan. «Es evidente que estamos enfrentando una campaña coordinada para desestabilizar a nuestro país, y China y Rusia parecen ser los principales instigadores de esta estrategia nefasta», afirmó a 'The Telegraph' un alto funcionario de Whitehall bajo condición de anonimato, que añadió que «lo que estamos presenciando es un ataque frontal a la verdad y a la decencia humana. No podemos permitir que esta campaña de difamación continúe impunemente».

La preocupación en los círculos gubernamentales ha alcanzado su punto más álgido ante la posibilidad de que actores estatales hostiles estén detrás de este supuesto intento de minar la la estabilidad del Reino Unido y de la confianza en la Familia Real, que está actualmente en horas bajas con el Rey Carlos III también enfermo de cáncer. «No podemos subestimar el poder de la desinformación en la era digital. Lo que vemos es un ataque directo a nuestra democracia y a nuestros valores fundamentales», añadió el funcionario, que explicó que «parte del modus operandi de los estados hostiles es desestabilizar las cosas, ya sea socavando la legitimidad de nuestras elecciones u otras instituciones».

Las sospechas sobre la intervención de China y Rusia en asuntos internos del Reino Unido se intensifican a medida que Downing Street prepara nuevas sanciones contra el régimen de Pekín. Los recientes ciberataques respaldados por el Estado chino contra miembros del parlamento británico han elevado las tensiones entre ambos países a niveles sin precedentes. «El Gobierno está comprometido a tomar medidas enérgicas contra cualquier intento de interferencia extranjera en nuestros asuntos internos. China y Rusia deben entender que no toleraremos su injerencia en nuestra democracia», advirtió Oliver Dowden, viceprimer ministro británico.

La creciente influencia de China y Rusia en la esfera digital ha despertado alarmas en Whitehall, donde se teme que estas potencias estén aprovechando la omnipresencia de las redes sociales para socavar la estabilidad de las democracias occidentales. «Estamos ante una nueva forma de guerra, una guerra de desinformación y manipulación que busca socavar los cimientos de nuestras sociedades libres», declaró un analista político consultado por el mismo diario, mientras que el funcionario denunció que «estamos en una encrucijada histórica, donde la democracia y la verdad están siendo amenazadas por fuerzas oscuras que buscan sembrar el caos y la discordia». En su opinión, «es hora de que nos unamos en defensa de nuestros valores compartidos y en contra de aquellos que buscan destruirlos».