La madre de Meghan Markle recuerda entre lágrimas cuando su hija se planteó el suicido: «Me contó que quería quitarse la vida»

Tras el anuncio de embarazo, el matrimonio se volvió súper popular entre el público y «los responsables de palacio se sentían muy amenazados por eso», tal y como asegura su amiga Lucy Fraser en el primer capítulo. Eran más famosos como pareja que su hermano el Príncipe Guillermo, heredero al trono británico, y Catalina de Cambridge y eso no era bueno a largo plazo. «El tema es que cuando alguien viene de fuera y debería ser una 'segundona', roba los focos y lo hace mejor que la persona que ha nacido para hacerlo, altera el equilibrio», confiesa Harry visiblemente molesto.

La primera vez que lo vieron claro fue tras la tradicional ceremonia del Remembrance Sunday -homenaje a los soldados muertos en las guerras mundiales y posteriores-, a la que acudió toda la Familia Real británica. Al día siguiente, la exactriz estadounidense copó todas las portadas por delante de la Reina Isabel II. Una situación que recordó mucho a lo vivido con la Princesa Diana de Gales.

Fue en este momento en el que comenzaron a «derribarla» para anular su popularidad. «De repente empezaron a aparecer historias en los tabloides criticando a Meghan por cualquier tontería. Lo fuerte es que se podían ver dos artículos juntos: uno en el que se alababa a Catalina y otro en el que se criticaba a Meghan», recuerda un amigo de la pareja. «Ese constante goteo de ataques tuvieron un impacto en ella», añade.

«Nunca la había visto así, es duro hablar de ello. Me asusté mucho», confiesa su amiga la también actriz Abigail Spencer, a la que conoció grabando la serie de 'Suits'. «Pensaba: 'Todo se acabaría si no estuviera aquí' y eso era lo que más miedo me daba, que lo veía muy claro», añade la propia Meghan. «Recuerdo que me contó que quería quitarse la vida y eso me partió el corazón porque sabía que era grave pero ser constantemente picoteada por esos buitres que llegan al espíritu y oírle decir que no quiere estar aquí... eso no es fácil de oír para una madre. No podía protegerla ni Harry tampoco...», dice su madre, Doria Ragland, sin poder evitar las lágrimas.

«Estaba destrozado. Sabía que ella sufría, los dos sufríamos, pero no pensé que llegaría a ese nivel. Y cuando llegó a ese nivel me sentí enfadado y avergonzado», añade Harry por su parte. «No lo llevé muy bien. Lo llevé como el Harry institucional y no como el Harry marido. Y lo que se impuso a mis sentimientos fue mi papel real. Me habían entrenado para preocuparme por '¿qué va a pensar la gente si no vamos a este evento? o 'llegaremos tarde' y cuando pienso en eso me odio por aquello. No podía darle lo que necesitaba de mí», recuerda Harry visiblemente emocionado.

«Quise pedir ayuda pero no me dejaron, les preocupaba cómo quedaría la institución», asegura Meghan. «Pensaban: 'Todos lo han aguantado, ¿por qué no lo aguanta ella?'», añade Harry.

Esta no es la primera vez que la duquesa de Sussex se sincera sobre los pensamientos suicidas que tuvo en aquella época. En marzo del año pasado, el matrimonio concedió una entrevista a Oprah Winfrey en la que, entre otras muchas cosas, se trató este tema.

Durante los cuatro años que Meghan Markle ejerció su papel monárquico estuvo preocupada por su salud mental: «Tuve pensamientos suicidas constantes y claros», dijo entonces. «La familia tiene una mentalidad de ‘esto es lo que es, no se puede cambiar’. No tenía en quién apoyarme. hubo falta de entendimiento y apoyo... Tenía miedo de que se repitiera la historia de mi madre», añadió Harry en referencia a Lady Di, quien sufrió depresión y murió huyendo de los fotógrafos.