Joana Sanz estalla en las redes sociales tras las críticas por su reconciliación con Dani Alves

El escenario se ha tornado particularmente tenso para la pareja desde la liberación de Alves, quien optó por un bajo perfil, concentrándose en recuperar el tiempo perdido con su familia y amigos. No obstante, su esposa, Joana, se encontró en el ojo del huracán mediático después de confirmarse la reconciliación.

Joana ha sido firme y vocal en sus redes. Publicó un fuerte mensaje dirigido tanto a los medios de comunicación como a los usuarios que la atacaron en línea. «Nos tomamos demasiado a la ligera atacar mediáticamente, insultar a través de una red social o intentar hundir la vida de otra persona simplemente porque tenéis opiniones contrarias», expresó Sanz en su último post y añadió que, «no nos olvidemos que las palabras hacen el mismo daño que empuñar un cuchillo. Poco se habla de la salud mental y poco se trata, además de la gran falta de educación que sufre este país».

Esta situación llega tras un periodo de altibajos emocionales para la modelo, quien inicialmente expresó su desconcierto y anunció su separación de Alves cuando este ingresó en prisión. Sin embargo, su postura cambió gradualmente, mostrando un renovado apoyo hacia su esposo conforme se acercaba el juicio. Este cambio no ha sido bien recibido por todos, atrayendo críticas y llevándola a reconsiderar su presencia en las redes sociales, motivo por el cual desactivó su cuenta Instagram por unas horas.

La pareja aprovechó recientemente el cumpleaños de Alves para viajar a Ibiza, buscando un respiro de las tensiones y disfrutando de momentos de tranquilidad. Joana compartió en Instagram imágenes de la escapada con el mensaje: «Llega un momento de tu vida en el que estás tan en calma, que nada de lo que sucede a tu alrededor te perturba más».

Por su parte, Dani Alves ha desactivado su cuenta de Instagram, eliminando cualquier rastro de las publicaciones anteriores. Con esta acción, queda claro que la pareja parece decidida a enfrentar juntos los desafíos que surjan, fuera del escrutinio constante de las redes sociales.