Karina: «Mi cupo de pasión lo tengo cubierto»

Compruebo que se acabó sacar un disco completo como antaño y se apunta a la corriente de lanzar un single y moverlo en plataformas y redes sociales. ¿Lo que sea con tal de que la escuchen?

He sacado una canción que estoy moviendo en redes porque hoy es la única vía que hay para hacerse oír. Las casas de discos van por otros derroteros y este lanzamiento lo estoy haciendo con el apoyo de Fermín Martín , quien lleva temas artísticos de AIE, asociación que preside Luis Cobos.

Se nota que sabe adaptarse a los tiempos, ¿pánico a quedarse fuera del circuito?

Hemos pasado por una pandemia tremenda y en ese tiempo he aprendido a realizar mis propios vídeos y subirlos a Instagram con ayuda de mi hija Azahara, que es la que vive en Madrid ya que mi otra hija Rocío está en Castellón donde trabaja en el Hospital provincial. Con Azahara hago vídeos y con Rocío subo otros en Tik Tok cuando voy a verla. Ahora espero hacer muchos ya que tenemos pensado pasar veinte días de julio en Castellón en familia.

¿Cómo diría el clásico, al final la familia es lo que importa?

Siempre he sido muy familiar y es algo que heredé de mi madre que siempre supo mantener a todos muy unidos. Yo lo he intentado también aunque mi vida ha sido más ajetreada sobre todo en mi juventud, ya que desde los 20 años no he parado de viajar por mi trabajo.

¿Pasado el tiempo cree que se ha perdido mucho de esa vida con los suyos?

En el terreno familiar quizá si he perdido algunas cosas aunque en el plano profesional no porque ha sido mi medio de vida y lo que me ha dado todo lo que tengo, además de poder sacar a mis hijas adelante. Hoy con las redes siento que me he reencontrado con una Karina más actual y adaptada a los nuevos medios. Es verdad que ya no hago tantos conciertos y que tengo la vida dedicada a los míos. En el fondo estoy encantada con esta tranquilidad que me permite disfrutar de mis tres nietos. El mayor, de 12 años, hijo de Rocío, vive en Castellón, pero los de Azahara, José Carlos, de cuatro, y Ana, de 14 meses, están en Madrid y todos son mi ilusión.

Cómo les ha pasado a tantas mujeres trabajadoras al final disfruta más de sus nietos que de sus propias hijas.

Pues sí.

¿Y de amores qué me cuenta?

Pues poco. Tengo una edad en la que quiero vivir tranquila. He tenido mis amores y he querido y me han querido mucho. Tengo dos hijas maravillosas y unos nietos que me dan una visión de la vida distinta, pero ya llevo 18 años viviendo sola, que no significa sentirme sola, pero tengo la vida hecha a mi manera y me va bien así.

¿No siente nostalgia de un compañero de vida con el que compartir esos momentos más personales?

Me hubiera gustado tenerlo en su momento y que me hubiera durado pero ahora ya no. Cuando viajo lo hago con mis hijas, pero ten en cuenta que no es fácil tener una vida anónima cuando llevas el personaje de Karina encima y es que la fama no ayuda a la hora de conocer gente nueva. Mi cupo de pasión y enamoramiento los tengo cubiertos y no hecho de menos nada. Sí es verdad que hay planes como ir al teatro o al cine donde podría echar en falta alguien pero te voy a confesar una cosa que pocos saben y es que la relación que mantengo con Carlos Díaz , el padre de mi hija Azahara, es excelente hasta el punto que el pasado marzo me rompí el húmero y me pasé 40 días con el brazo en cabestrillo. Lógicamente me ayudó mi hija pero también Carlos con quien me veo frecuentemente porque nos llevamos estupendamente bien.

¿Su ex no rehízo su vida?

Que yo sepa no. Saber que puedo contar con él para todo ayuda mucho. Con Carlos puedo ir a esos planes que hablábamos, de salir una tarde tranquilos, y es que hay mucho cariño entre nosotros.

¿Con su otro ex Juan Miguel Martínez, padre de Rocío, entiendo que no hay ese buen rollo?

No. Él va por otros derroteros y yo, a estas alturas de la vida, lo único que quiero es que todo el mundo sea feliz y sobre todo que me dejen tranquila a mí. Con eso me basta.

Da una imagen de una mujer muy alegre y feliz con la vida pero sé que también tiene sus bajones.

En la pandemia lo pasé mal, al igual que tanta gente, ya que estuve 53 días sin salir de un apartamento de 58 metros. No me quejo del tamaño pero fue muy duro no poder salir con la libertad que siempre he tenido. Llevé mucho desorden de horarios, me levantaba muy tarde… hasta que mi hija me recomendó que me pusiera un orden y adquiriera una disciplina en horarios y hasta con tabla de gimnasia y la comida que ella me dejaba en la puerta. Creo que no he tenido el Covid y he sido obediente con las pautas de las vacunas. Me lo he tomado muy en serio y más después de ver cómo algunas amigas cercanas entraron en urgencias con Covid y no lo superaron. Para mí, la mascarilla es algo que sigue en vigor cuando salgo a la calle porque he aprendido a convivir con ella y protegerme de muchas otras cosas.

¿Cómo ha vivido el momento Chanel posteurovisión?

Creo que es una gran artista y solo le recomiendo que gestione bien el éxito, que es algo efímero, y mucho cuidado con que se le suba a la cabeza. La gente te tienta con cosas… creo que ella tiene los pies en la tierra y está muy bien preparada con un curriculum muy bueno en musicales por eso le auguro un gran futuro profesional siempre que sepa rodearse de las personas adecuadas.