Menores inmigrantes en Andalucía
Walid Rael, 18 años: «Llegué hace tres años; ahora soy cocinero de sushi»
La historia de Wali arranca en Casablanca. De allí partió al norte de Marruecos y, tras pagar 4.000 euros, se montó en una patera
Walid Rael viste pantalón verde cacería, camisa de lino malva y jersey al hombro del mismo tono del pantalón. Conjunta hasta los zapatos. De espaldas sería cualquier chico de esa Sevilla que muere con la Semana Santa y la Feria. En realidad, es ... un chico inmigrante que llegó en patera desde Marruecos y acaba de cumplir 18 años.
A esa edad, y hasta el cambio de normativa, Walid tendría que haber abandonado el centro de acogida y, sin más ayuda, buscarse la vida. Tuviera o no papeles. Trabajase o no. No es el caso porque él está en uno de los pisos que tiene la fundación SAMU en Sevilla .
La historia de Wali arranca en Casablanca. De allí partió al norte de Marruecos y, tras pagar 4.000 euros, se montó en una patera. Pasó por varios centros de acogida y a los 18 años le ofrecieron ir a un piso a seguir estudiando. Dijo que sí al segundo. Ahora es cocinero y se dedica a hacer comida japonesa. «Llegué de Marruecos hace tres años y ahora soy cocinero de sushi» . Nada de ese futuro sería posible si no le hubieran arreglado los papeles.
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