Así será la nueva Agencia Integral de Emergencias que va a crear la Junta de Andalucía

Su creación tiene dos lecturas: una organizativa y otra de calado político. En cuanto a la primera, el objetivo es mejorar la respuesta a las emergencias de protección civil, lo que pasa por la unificación en un mismo continente de todos aquellos recursos complementarios con los que la Junta de Andalucía cuenta actualmente en estructuras paralelas.

La derivada política es que Antonio Sanz aumenta sus competencias y, por ende, gana poder en la estructura autonómica. La agencia no es una idea nueva. El proyecto estaba recogido en el programa electoral con el que el actual presidente de la Junta, Juanma Moreno, se presentó a las elecciones autonómicas del pasado 19 de junio, en las que arrolló con una mayoría absoluta de 58 diputados. Sanz es un gestor curtido en el abordaje de emergencias. La experiencia se la dio el tiempo que estuvo al frente de la Delegación del Gobierno de España en Andalucía (2015-2018). La coordinación entre la Junta y el Ejecutivo para combatir las llamas en el incendio declarado en 2017 que afectó al espacio natural que rodea el Parque Nacional de Doñana recibió agradecimientos mutuos.

Ésta es una guía para entender en qué consistirá la nueva Agencia Integral de Emergencias de Andalucía.

Fusionará organismos que ahora funcionan por separado: el servicio 112, Protección Civil, el Grupo de Emergencias de Andalucía, el Instituto de Emergencias y Seguridad Pública (ISPA), «unidas a lo que hasta ahora es el Plan Infoca en gestión de incendios forestales, a los que se va a incluir cualquier emergencia natural», según explicó el consejero de Presidencia e Interior, Antonio Sanz, a quien se adscribirá el nuevo organismo público.

El objetivo es concentrar bajo un mando único la gestión operativa de incendios forestales y emergencias naturales que tengan lugar en el territorio andaluz. Bajo esta nueva estructura, se pretende actuar con mayor eficacia y coordinar todos los efectivos y recursos con los que la Junta de Andalucía cuenta actualmente a través de estructuras paralelas e independientes. Los destructivos incendios forestales de última generación plantean un nuevo desafío que exige una sincronización total. Desde la Junta indicaron que Andalucía es «especialmente sensible a los efectos más indeseables del cambio climático», como la reiteración de incendios forestales «de enorme virulencia con grave riesgo para las personas».

No. El Consejo de Gobierno sólo dio este martes el primer paso instando a crearla a la Consejería de la Presidencia, Interior Diálogo Social y Simplificación Administrativa. Estos trámites pueden prolongarse durante cuatro o cinco meses, empezando por la aprobación de unos estatutos que definan su actividad y acabando por la integración del personal adscrito actualmente a los organismos que se fusionan. Entre otros, se traspasarán los más de 3.500 bomberos forestales que intervienen en la extinción de incendios, dependientes ahora de la Agencia de Medio Ambiente y Agua de Andalucía (Amaya). Los efectivos pasarán de una agencia a otra y desde el punto de vista jurídico o laboral no notarán ningún cambio.

La intención, manifestada por el consejero Antonio Sanz, es que el nuevo organismo no represente un gasto extra ni tampoco el aumento de los altos cargos y directivos. No acarrearía ningún desembolso adicional para los andaluces, «más allá de lo que es la evolución, todos los años, de mejora de los medios técnicos de los que disponen los servicios de emergencia», precisó.

No. La citada entidad mantendrá otras competencias, aunque ya no estarán adscritos a ella los profesionales del Infoca. Según detalló el consejero de Sostenibilidad, Medio Ambiente y Economía Azul y portavoz de la Junta, Ramón Fernández-Pacheco, tiene «una labor fundamental en la conservación del medio ambiente, la gestión de bienes de uso público que se encuentran en las zonas naturales de Andalucía, con multitud de cometidos que por supuesto van a seguir vigentes».