Elio Berhanyer y Antonio Gala: tejido y papel para una exposición en Córdoba

La Fundación Antonio Gala acoge hasta el 14 de diciembre la exposición «Historia de una amistad» , en que se muestra la colaboración entre el escritor y el diseñador. Que no modista, porque aunque el texto que recibe al espectador hable de esta palabra, el propio Elio Berhanyer lo aclaró precisamente allí: «Yo soy diseñador y no modista; no sé coser». Recibe al espectador un texto de Antonio Gala habla de su admiración por el creador, con el que por aquella época cenaba todos los sábados. «Es alto, moreno, enjuto y estaría elegante hasta vestido de lagarterana. Su elegancia va, como todo lo que crece, de abajo arriba, y, como todo lo vivo, de dentro afuera».

Y a partir de ahí convive la exposición con fotografías personales del autor, con recortes de prensa, recuerdos de su larga trayectoria especialmente como dramaturgo, en que cosechó sus mayores éxitos literarios, y de programas de sus obras. En Madrid y en toda España, pero también en Córdoba, porque el 50 aniversario del Teatro Góngora , en 1982, se celebró con una obra de Antonio Gala, «Anillos para una dama» .

El espectador puede conocer una serie de trajes que usó Antonio Gala y que llevan la firma del autor, cada uno de ellos para un uso. Está el conjunto invernal de pantalón de pana y jersey al lado del de inspiración oriental que usa en sus veranos en la finca La Baltasara, y varios trajes incluidos el de chaqueta de ante.

Las piezas más interesantes de la exposición son las que aporta la actriz Victoria Vera, que las usó tanto en las tablas como en distintos actos sociales. Por eso se pueden ver las que creó para «El adefesio» , de Rafael Alberti , y para «La decente», de M iguel Mihura , con el negro como color predominante, y un corte clásico que sin embargo deja mostrar toda la elegancia.

En dos vitrinas están algunas de las prendas que Elio Berhanyer diseñó para el propio Antonio Gala, y que forman parte del imaginario con el que todo el mundo es capaz de reconocerlo. Por eso aparecen pañuelos con distintos estampados , que formaron parte de la indumentaria del autor, y también corbatas, y todos ellos se podrían poner al día de hoy, de tan actuales. Hay relojes e incluso uno de los característicos bastones de Antonio Gala, que ha reducido sus apariciones, pero que habla con sus textos de la obra de un autor que entendió el diseño de moda como un acto cultural.