La Semana Santa de Córdoba siempre ha estado y está en continuo cambio. Se cumplen 25 años de la última carrera oficial que pasaba por la calle Cruz Conde, lo que generaba el regreso de las cofradías por calles ahora utilizadas por unas pocas.
Al ... llegar los cortejos por Cruz Conde hasta la esquina con Conde de Robledo, las calles Cabrera, Caño, Osario, San Zoilo, Capuchinos y el Bailío estaban muy frecuentadas. En la actualidad sólo toman ese camino las que tienen sus sedes cerca, como la Paz y la Estrella, en algunos años.
La plaza de Capuchinos, uno de los lugares más queridos por los cordobeses, era un lugar por el que pasaron muchas cofradías en sus caminos de retorno, como la Sentencia o las Angustias. Otras también lo hacían, pero además bajaban los escalones de la cuesta del Bailío.
Las que más recientemente lo hicieron fueron la Esperanza, el Buen Suceso y el Prendimiento, pero a lo largo de los años también la Buena Muerte, la Expiración o las Penas en los años en que salía de la casa de los Guzmanes, en el Realejo. Era el camino más corto desde la Medina hasta la Ajerquía.
La Semana Santa de 1998, en abril, fue la última en la que el itinerario común de las cofradías discurrió por Cruz Conde, algo que era así desde mediados de los años 80, previo paso por Claudio Marcelo y las Tendillas, por lo que estuvo consolidado durante más de quince años.
Después llegaron aires de cambios: en 1999 la plaza de las Tendillas permanecía en obras y la carrera oficial siguió por Gondomar. En 2001 se implantó la que permanece en la memoria más reciente de los cordobeses: por Claudio Marcelo y Tendillas. Y en 2017 se materializó la gran variación, la carrera oficial en la Catedral y su entorno.
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