Italia y Francia tiran a la baja de una exportación en caída en Córdoba

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La caída de las compras que realizan en la provincia Italia y Francia, dos de nuestros principales clientes, tira de ese descenso. De hecho, de las cinco naciones a las que más exporta Córdoba -suman este año el 68% de las ventas-, son ambas las que han registrado un retroceso.

El país transalpino es el segundo principal comprador en la provincia -en 2022, perdió la primera posición que venía ostentando en los ejercicios anteriores-. En los ochos primeros meses, los empresarios cordobeses realizaron operaciones con firmas de ese estado que supusieron 322,9 millones. Esa cifra implica un descenso interanual del 14,3%. Son 53,9 millones menos.

Y el principal producto que sale desde aquí hacia Italia es el aceite. Las ventas de oro líquido sumaron 144 millones. Son casi 46 menos, con lo que el descenso fue del 24%. Este enorme botón de muestra sirve para explicar uno de los factores de la caída de las exportaciones.

El conjunto de operaciones con aceite, uno de los dos pilares del comercio exterior provincial, a todo el mundo hasta agosto generaron los 406,7 millones cuando en idéntico periodo de 2022 esa cifra había sido de 529,4. Es decir, se perdieron 122,7, lo que se traduce en una merma del 23,2%. Tras este descenso, se encuentra una campaña 2022-2023 que dejó una producción muy baja de este producto en Córdoba: unas 142.000 toneladas, una cifra marcada por la sequía. En la anterior temporada, esa cifra había sido de 300.000. Esa disminución radical del aceite disponible merma la oferta y eleva los precios, con lo que hay compradores internacionales que dejan de adquirir aquí.

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Y este mal dato se agrava porque tendrá recorrido. La previsión de la Junta es que en la campaña 2023-2024 la producción de aceite vaya a ser de 143.000 toneladas. O sea de nuevo, será corta, manteniéndose a priori los precios elevados.

Francia, tercer estado que más compra aquí, es el otro país que ejerce de locomotora de la bajada de las ventas al extranjero. En el periodo de 2023 del que se tienen indicadores, las ventas a la nación gala se situaron en los 232,8 millones. Es una cifra inferior en 42,2 a la de un año antes (-15,3%). Está influenciada por el retroceso en dos de los tres productos que más compraron en este año los empresarios franceses aquí. El que encabeza la tabla es el cobre y sus manufacturas, con 53,4 millones. Esa cifra implica una caída interanual del 17,1%, con 11 millones menos.

Pero hay que advertir de que, en el conjunto de las operaciones de nuestro territorio, este capítulo de las exportaciones -su otro gran pilar- tuvo balance positivo. Las ventas fuera de las fronteras españolas alcanzaron los 640,9 millones -producto que más dinero aporta-. Son 12,9 más (+2%). El polo del cobre, capitaneado por Cunext, sigue dejando buenas noticias a la economía.

Otro apartado importante que se resiente en las exportaciones a Francia es el de máquinas y aparatos mecánicos -es el tercero en importancia en los negocios con los empresarios del país vecino-. En este 2023, la cifra se queda en 32,7 millones. Son 9,4 menos que un año antes (-22,3%). Y este retroceso es el ejemplo de lo que le ha pasado a un capítulo importante de las ventas al extranjero.

Ese epígrafe de máquinas y aparatos mecánicos -en el que se encuadra la actividad del potente sector del frío industrial que se articula en torno a Lucena- es el tercer principal aportador de fondos al comercio exterior provincial. Y en los ocho primeros meses, los negocios de Córdoba realizaron operaciones con este tipo de productos por valor de 106,9 millones. Son 28,2 menos (-20,9%).

Si se extiende el listado a los diez países a los que más vende en este ejercicio, también hubo caídas en lo que ingresó Córdoba por sus operaciones con Holanda (-27,1%); Polonia (-11,2%); y Reino Unido (-4,7%).

Entre los cinco principales clientes, fueron Portugal, Marruecos y Estados Unidos los que evitaron males mayores. La nación lusa, como ya pasó en 2022 cuando destronó a Italia, vuelve a ser la principal vía de ingresos en las ventas al extranjero, aunque están congelados respecto a 2022. Hasta agosto, se contabilizaron 359,2 millones, únicamente un 0,2% más.

Los que más buscan las empresas portuguesas aquí es el cobre y sus manufacturas. Hicieron adquisiciones por un importe de 156,1 millones. Fueron 17,3 más que 365 días antes (+12,5%).

Mejor comportamiento tuvieron los negocios con Marruecos, cuarto mejor cliente en el presente ejercicio. Las operaciones con este país alcanzaron los 192,3 millones. Esa cifra supera prácticamente en un 5% a la registrada de enero a agosto de 2022.

Para que se lograra, resultó fundamental la evolución de las operaciones con cobre y sus manufacturas, ya que supusieron 85 de cada cien euros de las exportaciones a Marruecos. Generaron 163,1 millones, un 7,2% más.

El 'top five' de nuestros clientes lo cerró Estados Unidos, con el mejor comportamiento en este selecto club. El alza fue del 14% al pasarse de 142,5 millones a 162,4. El saldo positivo se logró pese al descenso del 11% en el aceite -el principal producto que compra aquí, con 96,1 millones-.

Pero hubo otros epígrafes que lograron compensar ese retroceso. Destacaron las ventas de aparatos y material eléctrico, que se dispararon un 550% al pasar de cuatro millones a 26, y las de legumbres y hortalizas, que engordaron un 124% tras saltar de 5,3 a 11,9. Y en este último apartado hay que detenerse porque para Córdoba supuso el quinto capítulo más importante del conjunto de sus exportaciones. Las ventas a todo el mundo en este concepto supusieron ingresos por valor de 67,1 millones, un 45% más que un año antes. Las cebollas y, sobre todo, los ajos son la locomotora en este epígrafe, con 38,6 millones (+18%).

Si se baja al grupo de los diez mejores compradores, también tuvieron comportamiento positivo Alemania (+3,5%) y México (+83,7%).

Una última pincelada dibuja mejor el mapa del descenso de este importante elemento de la economía provincial. Entre los cinco capítulos que aportaron más exportaciones, en el cuarto, el de las conservas de verduras o frutas, se dio también una disminución. Sus ventas al extranjero se situaron en los 83,7 millones. Son 6,5 menos que en los ocho primeros meses de 2022 (-7,2%). Aquí, lo fundamental es la aceituna, el otro gran producto del olivar. Sus exportaciones se situaron en 70,5 millones, un 7,1% menos.

En esta bajada, fueron importantes los descensos sufridos con Arabia Saudí -de 9,5 millones se redujo a 7,1 (-24,9%)- y México -de 3,7 millones mermó a 730.150 euros (-80,5%)-.