Poca gente y bienvenida con caldo y chocolate en la jornada de puertas abiertas del Congreso

A pesar de que el tiempo acompaña y hace sol, la espera no es tan larga como otras veces. Esta mañana las aglomeraciones no son tan llamativas como otras veces, aunque se cuenta con que el ritmo se anime, también por que todas las personas que accedan al Congreso podrán llevarse como regalo un pequeño ejemplar de la Constitución. Además de un detalle de recibimiento a elegir entre un caldo o un chocolate caliente.

Lo más concurrido, algo que nunca cambia, es el hemiciclo. Allí los ciudadanos pueden tomarse su tiempo entre los escaños, sentarse en ellos -excepto los reservados al Gobierno- y tomar fotografías. Uno de los más buscados es el de Pedro Sánchez , jefe de la oposición, aunque la mayoría de los visitantes deambula entre las filas que componen la bancada del PP.

Además de Posada han acudido a saludar a los primeros ciudadanos la vicepresidenta de Congreso, Celia Villalobos; el secretario primero, Ignacio Gil Lázaro y el secretario cuarto, Teófilo de Luis. Poco después se ha incorporado el vicepresidente segundo, Javier Barrero.

Este año quienes se acerquen al Congreso no podrán realizar una visita tan completa como la de años anteriores, debido a las obras que tienen lugar en la segunda planta del Palacio de la Carrera de San Jerónimo, donde habitualmente se recorre la Galería de Presidentes que alberga los retratos de todos los presidentes que ha tenido el Congreso. Quienes desfilen por la institución hasta las siete y media de la tarde y también durante la jornada del jueves, sí podrán otras estancias del Congreso, así como una exposición organizada con parte del fondo documental de la Cámára que, según ha señalado Posada, recoge piezas «interesantes» y que hacen referencia a algunos «temas anecdóticos».