El coste salarial de la subida del SMI asciende a 80 euros más al mes para las empresas, según Cepyme

El coste salarial mensual para un salario mínimo de 1.184 euros, en 14 pagas, con las cotizaciones sociales a cargo de la empresa y el Mecanismo de Equidad Intergeneracional (que cada año ascenderá hasta 2029), se sitúa entre los 1.816 y los 1.903 euros, dependiendo del tipo de cotización por accidentes de trabajo.

Esto arroja una diferencia entre 78 y 81 euros, un 56% y 62% más, respectivamente, sobre los 50 euros mensuales propuestos por el Gobierno. Si, además, el coste anual se prorratea entre once meses de trabajo, descontando el mes de vacaciones, el coste salarial efectivo por mes de trabajo está en un rango de entre 1.981 y 2.076 euros.

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El SMI ha sufrido un incremento del 73,1% entre 2016 y 2024. Con la subida propuesta por el Gobierno para este año, el incremento acumulado del SMI desde 2016 será del 80,7%. Este incremento de los costes, según Cepyme, supone «una onerosa carga para las empresas», afectando a las pequeñas y medianas especialmente. Los costes laborales de las pymes acumulan un alza del 18,1% desde 2019.

Del mismo modo, la Confederación insiste en que, tal y como establece el Estatuto de los Trabajadores en su artículo 27, la subida del salario mínimo debe tener en cuenta la situación económica general, la evolución del IPC, el incremento de la participación del trabajo en la renta nacional y la productividad de nuestra economía.

Desde finales de 2018, el salario mínimo ha crecido casi tres veces más que el IPC (54,1% y 19,4%, respectivamente). La productividad de la pyme, por otra parte, cae estrepitosamente hasta situarse en niveles próximos al año 2015. Por otra parte, argumenta Cepyme, esta subida acumulativa tiene un impacto desigual por sectores, lo que no avala un nuevo incremento con efectos perjudiciales sobre la competitividad y el empleo en las empresas, así como especialmente dañino para el ramo agropecuario, en mínimos de empleo de los últimos 20 años.