Más muertes en el trabajo aunque cae la actividad laboral

Este incremento se produce a pesar de la caída de la actividad económica provocada por pandemia del coronavirus. De hecho, el número de accidentes laborales con baja descendió hasta octubre un 26%, situándose en 397.019. Es decir, ha habido más muertos a pesar de la caída de la actividad y del número total de accidentes.

A los 502 fallecidos durante la jornada laboral hay que sumar otros 93 muertos «in itinere» (desplazamientos desde o hacia el lugar de trabajo), por lo que la cifra total de víctimas mortales por accidentes laborales subió un 3% respecto al mismo periodo de 2019. Este ligero incremento se debe a que los fallecidos «in itinere» han caído un 28% por la drástica disminución de los desplazamientos: unos, por el teletrabajo; otros, por la crisis económica. Es decir, cada día fallecieron dos trabajadores entre enero y octubre.

Del total de fallecidos, 529 eran asalariados y 66 por cuenta propia . En el primer caso supone un aumento del 2,5% y, en el segundo, del 6,5%. Además, el 93% son hombres y el 7% mujeres. De los 502 accidentes mortales en la jornada de trabajo, 212 se produjeron en el sector servicios (42,23% del total), 121 en la industria (24,14%), 88 en la construcción (17,5%) y 81 en agricultura (16,13%).

Sobre los motivos que provocaron esos accidentes mortales, 189 (37,65% del total) se debieron a infartos, derrames cerebrales y otras causas naturales, según las estadísticas de Trabajo. En segundo lugar está la caída de la víctima desde una altura, con 60 fallecidos (12%), seguido de la pérdida de control del medio de transporte o de carga, con 45 casos (9%).

De los 93 fallecidos «in itinere», 87 (93,5% del total) fueron por accidentes de tráfico, cinco por causas naturales y uno por la agresión de personas ajenas a su empresa.

En cuanto a la categoría laboral de los fallecios en accidentes de trabajo, 109 (18,3% del total) eran conductores y operadores de maquinaria móvil y 84 (14,11%) eran trabajadores cualificados de la construcción.

Por edades, la mayor mortandad se registró en el colectivo de 50 a 54 años, con 134 fallecidos (el 22,5% del total), seguido de la franja de entre 55 y 59 años, con 108 muertos (18,15%), y la de entre 40 a 44 años, con 70 víctimas (11,8%). Cabe reseñar que el 52% de los 595 muertos en accidentes de trabajo tenían entre 50 y 64 años .

Con estos datos, UGT considera «imprescindible articular un plan de choque contra la siniestralidad laboral de forma inmediata. El constante aumento de las muertes en el trabajo es altamente preocupante y debe ser abordado urgentemente».

Además, este sindicato reclama la creación de la figura del delegado territorial y sectorial de prevención a través de la negociación colectiva. «Ayudarían sin duda a mejorar la prevención de riesgos en las pequeñas y medianas empresas que no tiene representación sindical. Es un hecho que los centros de trabajo sindicalizados son centros de trabajo más seguros».