Airbus gana casi 4.500 millones en Bolsa tras el accidente del 737 MAX 8 de Boeing

Y es que las acciones de la compañía, participada por el Estado francés, el alemán y el español, se han establecido en un máximo histórico de 117,68 euros tras repuntar un 5,41% en las últimas cinco sesiones. Una racha alcista que los analistas han achacado a la incertidumbr e que rodea ahora la cartera de pedidos de Boeing.

«Por el momento, el descalabro de Boeing no está penalizando a su competidor europeo, todo lo contrario», apuntan desde IG Mercados. Entre Boeing y Airbus se reparten casi el 90% del mercado aeronáutico, por lo que el fabricante europeo se sitúa como el gran beneficiado si la crisis de Boeing desemboca en una cascada de indemnizaciones y cancelaciones.

Aerolíneas como VietJet Air, Kenya Airways y Lion Air ya han anunciado que revisarán los encargos del Boeing 737 MAX que han realizado. Y no descartan sustituir estos aviones por Airbus A320, el principal competidor de este modelo . La saudí Flyadeal anunció ayer que paralizaría el pedido de treinta 737 MAX que había planificado hasta que se resuelva la investigación sobre el accidente producido en Etiopía. «Estamos monitorizando la investigación y mantenemos un contacto constante con Boeing. Esperaremos los resultados de la investigación para tomar una decisión», explicaron desde la firma a Reuters.

En España, Ryanair y Air Europa tienen previsto recibir flotas del modelo cuestionado durante los próximos meses, pero por el momento aseguran que mantienen su confianza en la aeronave y en el fabricante estadounidense. La respuesta de Boeing ha sido paralizar las entregas previstas del 737 MAX 8.

Los analistas de Citi, sin embargo, han hecho referencia a las complicaciones que puede tener Airbus para digerir una cascada de nuevos pedidos. El banco de inversión ha destacado en un informe reciente que el A320 está por el momento agotado. Por ello, si se produce un incremento de encargos de este avión, el fabricante europeo tendría que poner en marcha su fabricación desde cero. Así, no sería hasta dentro de tres años cuando el incremento de la producción tendría un impacto real en las cuentas de la empresa.

Se da la circunstancia de que la crisis de Boeing se produce en un momento delicado para su principal competidor. El fabricante europeo anunció recientemente que suspenderá la producción del «superjumbo» A380 a partir de 2021 por la falta de demanda de este aparato. Una medida que amenaza 3.500 empleos en todo el mundo y unos 400 en España.

¿Revertiría esta situación un incremento en la producción del A320? La compañía por el momento guarda silencio. Y los trabajadores opinan que, en principio, son «procesos diferentes». «Los problemas que ha tenido Boeing los puede tener otro fabricante. Es difícil saber ahora el alcance de esta crisis», explican fuentes sindicales, que añaden que «ni siquiera se conoce cómo se llevará a cabo la finalización del programa 380».

Mientras, fuentes del sector destacan que « Boeing está trabajando contra reloj para solucionar el defecto técnico que está afectando al 737». En este contexto, la compañía es consciente de que el tiempo es oro y que el impacto financiero -aerolíneas como Norwegian ya han anunciado que exigirán una indemnización a la compañía- y reputacional de la tragedia dependerá del tiempo que estén en tierra estos aviones. Ayer, un grupo de investigadores franceses analizaban la caja negra del 737 MAX 8 que se estrelló en Indonesia en octubre para determinar si había relación entre esta tragedia y la de Etiopía.

Por el momento, el mercado ha dado un pequeño respiro al fabricante. Después de dejares casi 30.000 millones de dólares en Bolsa en las sesiones posteriores a conocerse el siniestro, la compañía cerró ayer la sesión con una subida cercana al 2%.