Un libro para desvelar la verdad y la esencia de Pepe Luis Vázquez

El teniente de hermano mayor de la Real Maestranza, Santiago de León y Domecq , fue el encargado de abrir el acto para recordar que estas obras «suponen la colaboración con la Universidad de Sevilla y la Fundación de Estudios Taurinos» además de recordar la colocación en el año 2003 de un azulejo en la Plaza de Toros de Sevilla que rememora las 16 tardes en las que Pepe Luis Vázquez salió a hombros.

Este título es el número 22 de la colección «Tauromaquias» dirigida por el catedrático de Literatura Rogelio Reyes Cano , que ha coordinado la obra junto a Juan Manuel Albendea y Carlos del Barco. El volumen es una obra coral que cuenta con artículos de los coordinadores así como con prestigiosas firmas como las de Manuel Clavero o el periodista Nicolás Salas, que colaboró en el libro antes de morir.

Asimismo, en la elaboración de sus páginas han participado Aquilino Duque y Andrés Luque y se recogen testimonios de ganaderos como Antonio y Eduardo Miura o del torero Curro Romero , entre otras personalidades del mundo de la Tauromaquia.

En su presentación, Francisco Apaolaza desgranó el contenido del trabajo dedicado al sabio de San Bernardo al que definió como «el gran maestro». El portavoz de la Fundación del Toro de Lidia subrayó la importancia de los libros en la tauromaquia «ya que hablan de emociones y recuerdan lo que hemos visto y lo que hemos sentido en el ruedo; los libros son parte de lo que somos y hemos vivido de ahí que nos guste tanto escribir de toros».

El periodista disertó sobre la condición de naturalidad que «remite a lo simple y a lo sencillo que en el toreo es aquello que está desprovisto de artificio». Para Apaolaza «algunos hombres han buscado durante toda su vida la naturalidad porque están buscándose a sí mismos» y argumentó que «los toreros más naturales son los más verdaderos ya que la naturalidad remite a la verdad, a la esencia, al interior».

Para ejemplificar esta condición citó a toreros como Pepe Luis o Curro Romero y subrayó «que la naturalidad no se puede de fingir » de ahí que «los toreros que han sido los más auténticos también han sido los más difíciles de definir». El periodista insistió en que la naturalidad es «eterna e inaccesible» e incidió en que el acercamiento a un torero nunca se puede hacer por las cifras. «No hay otra manera de definir lo que fue Pepe Luis Vázquez que decir que fue Pepe Luis», argumentó, antes de que concluir que «las esencias de las personas se pueden ver a través de su arte».

La presidenta de la Fundación de Estudios Taurinos, Fátima Halcón , agradeció la colaboración de la Real Maestranza y a la Universidad de Sevilla y a «quienes han hecho posible este proyecto Rafael Valencia, Nicolás Salas, la Fototeca Municipal de Sevilla así como a la familia Vázquez por la cesión de imágenes y disposición para que la obra sea una realidad».