«Chicuelo», la clave del toreo moderno

Para conmemorar la efeméride, el Ateneo de Sevilla acogió ayer una charla-coloquio y una exposición sobre el diestro. La muestra estuvo compuesta por 150 fotografías de gran calidad y valor histórico pertenecientes al archivo de la familia, que tuvo una nutrida representación, como la de su hijo Rafael Jiménez y sus nietos Curro y Manolo Chicuelo, quien comentó las imágenes.

«Hemos tratado de explicar la lidia completa de un toro a través de la forma de interpretar el toreo de Chicuelo, que va más allá de los pies juntos y de la chicuelina , lance por el que se le ha reconocido siempre», explica. Entre las imágenes se puede ver la de su alternativa en la plaza de la Real Maestranza en la Feria San Miguel de 1919 con Juan Belmonte de padrino y su hermano Manolo Belmonte de testigo.

Asimismo, otra fotografía capta a Chicuelo concediendo el doctorado a Pepe Ortiz en México, Manolo Do Santos o el propio Manolete en Sevilla . En la exposición también se muestran retratos del torero sevillano junto a Cagancho, Curro Puya o Marcial Lalanda en plazas de todo el orbe taurino, desde Madrid, Barcelona, Sevilla hasta Lima (Perú) o México.

A continuación se celebró un coloquio en el que participaron su nieto, la vocal del Ateneo, Atenea Melgarejo , el informador taurino y escritor Álvaro Rodríguez del Moral y el aficionado y autor del blog «La razón incorpórea», José Morente .

Ambos comentaron la importancia de Chicuelo como « el eslabón sin el que no se puede entender el toreo moderno que es quien culmina la revolución iniciada por Joselito el Gallo», además del «convulso momento histórico» que se vive en la ciudad de Sevilla cuando Chicuelo se hizo matador.

«Ese mismo día con media hora de diferencia se celebró otra alternativa, la de Juan Luis de la Rosa en la plaza de toros Monumental», recordó Rodríguez del Moral a la vez que subrayó la existencia de « una ciudad polarizada entre los partidarios de Belmonte, en la Maestranza, y de Gallito, en la Monumental».

La charla sirvió para reivindicar no solo la figura de Manuel Jiménez «Chicuelo» sino de la edad de plata del toreo , además de desvelar cuestiones como «el intento de reabrir la Monumental en 1929 por parte de Chicuelo, Belmonte y el Niño de la Palma que fueron a comprar ganado a Salamanca pero no lo consiguieron y después la derribaron», aseguró Manolo Chicuelo .