Fernando Robleño: «La tarde ha sido muy dura, pero he sentido los olés de Madrid, que son únicos»

Al ser el director de lidia, tuvo que matar al toro que cogió a Garrido, por lo que su segundo lo toreó en quinto lugar, y dejó una actuación por la que dio dos vueltas al ruedo: «Lo he sentido muy especial. Me he entregado con el toro y he dado muletazos muy bonitos. Ahora estoy muy en caliente, pero la verdad es que estoy muy contento. El toro era de pronto y en la mano, y así lo vi, así lo hice, y la verdad es que me salió bien. He sentido los olés de Madrid, de mi plaza, que son únicos. Se pasa muy mal, es un esfuerzo muy grande, la tarde es muy dura, el piso como está cómo es el agua… El haber podido sentir esos olés…» dijo emocionado a los micrófonos de Mundotoro TV, pero quedó interrumpida su frase porque el sexto de la tarde, que al final fue devuelto, saltó al callejón, provocando un gran susto.

Menos contento estaba Román tras pasaportar al segundo de la tarde: «Ha faltado mucha vida. El toro por el lado derecho, y yo lo he visto enseguida, no me aguantó nada. Ha durado dos tandas o tres». Al finalizar la tarde, volvió el valenciano a dar sus impresiones, con su simpatía habitual y su espontáneo modo de hablar: «Se lo he dicho a Manuel (Martínez Erice). Hoy podíamos echar todos los toros de todas las ganaderías y no nos embiste ni uno. Hay hay días que al final… A mí me gusta el toro malo o el bueno, pero es que con el toro que no dice nada es muy difícil. Yo quería o el malo o es bueno, pero el típico toro que ¿qué haces? Te peleas y no vale para nada, mejor matarlo y ya está. Yo si digo la verdad creo que por lo que destaco es por torear despacio, y hoy juro que tenía el presentimiento de poder hacerlo, porque lo de Adolfo me encanta, me encanta el dejársela ahí puesta. Pero es que no he podido, es que el mío primero me ha dejado dar dos muletazos, pero no he podido hacer más. A ver si me embiste uno, Dios quiera que sea pronto. Nos vemos en Pamplona».

Adolfo Martín, hijo, hizo balance de la corrida que lidió: «En la corrida ha habido dos toros que han sobresalido, primero y quinto. Luego, en general, la corrida no ha respondido a las expectativas que traíamos y que el público esperaba. No me han gustado los toros, se han venido a menos en la muleta y les ha faltado raza y transmisión a alguno de ellos. El quinto ha sido muy importante la muleta, pese a haber sido protestado. No obstante, nosotros esperábamos mucho más. La corrida no ha respondido, ha faltado transmisión y casta a muchos de ellos. Muchos se han afligido en la muleta, y no es lo que buscamos».

José Garrido, que tenía una única comparecencia en San Isidro, fue cogido durante la faena de muleta por el tercero de la tarde. Su parte rezaba: «Herida por asta de toro en cara posterior 1/3 inferior muslo derecho. Con una trayectoria hacia delante y abajo de 15 cm que produce destrozos en músculos isquiotibiales y contusiona nervio ciático. Pronóstico grave que le impide continuar la lidia».