Sale a concurso por dos años la plaza de toros de Cáceres

Entre las características del contrato, el pliego técnico recoge la obligatoriedad de celebrar tres festejos taurinos, de los que una corrida de toros deberá coincidir con la celebración de San Jorge , mientras que los otros dos serán durante la feria de San Fernando, uno de ellos una corrida de toros, según ha informado el Consistorio en una nota de prensa.

El pliego señala que cada uno de los carteles de toros que se celebren deberá contener «obligatoriamente, como mínimo», u n matador de toros de la categoría A , mientras que las ganaderías deberán ser de «reconocido prestigio», cuyos toros hayan sido lidiados en plazas de primera categoría.

Además, como novedad, se incluye una cláusula por la cual el licitador, además de los festejos taurinos, «podrá organizar otro tipo de eventos no vinculados a este tipo de espectáculos taurinos».

Aunque el Ayuntamiento podrá celebrar «cualquier tipo de actividad en ese espacio, siempre que no interfiera en la programación taurina de la temporada y demás actividades ofertadas por el adjudicatario».

En cuanto a las obligaciones del contratista, deberá gestionar todos los servicios de las instalaciones y dependencias. También deberá encargarse del pago de los gastos generados por la prestación del servicio (agua, electricidad...), así como también la obligatoriedad de contratar un seguro de responsabilidad civil.

En contraprestación, el adjudicatario percibirá como retribución los precios de las entradas a los festejos, espectáculos o actividades desarrolladas. El procedimiento se convoca sin fijación de presupuesto base de licitación o canon a satisfacer por el adjudicatario. El plazo para presentar ofertas es de quince días naturales, a contar desde su publicación en el (BOP).

Dentro de lo que se considera categoría A , se incluyen a matadores de toros como José Tomás, Morante de la Puebla, José María Manzanares, Miguel Ángel Perera, Enrique Ponce, Alejandro Talavante, Antonio Ferrera, José Garrido, Julián López «El Juli» o Roca Rey.

Ésta era una de las últimas condiciones que quedaban por cumplir del Grupo Municipal Ciudadanos, dentro de un decálogo que la formación naranja exigió para dar luz verde a los presupuestos del año pasado.