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ABC Cultural

Paco Ureña desata la tormenta perfecta en Santander

Del odio al amor Morante, que pasó de una bronca épica a una lujosa ovación: a las ocho y cuarto todos eran del genio...

Paco Ureña, en el momento de la estocada Fotos: Serrano Arce
Rosario Pérez

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Como la carpintería de Geppetto quedó el ruedo de Cuatro Caminos. Más serrín que negra arena cubría el escenario: los operarios habían trabajado a destajo para reducir el barrizal y acondicionarlo al gusto de la terna. Aunque en un país donde la queja ... es el deporte nacional, como advertía un fotógrafo mexicano, nunca llueve al agrado de todos.

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