John Fogerty se estrena en Barcelona con un festín de clásicos de Creedence

Estuvo casi quince años diciendo que no con el dedo cada vez que alguien le nombraba a Creedence Clearwater Revival y otros tantos alejado de los estudios de grabación, haciéndose el sueco cada en cuanto alguien le sugería que quizá fuese buena idea darle continuidad ... a su estreno en solitario, pero ahora las cosas son diferentes. Muy diferentes.Como si quisiera desquitarse de todos los años que perdió enredado en conflictos legales y enfrentamientos por los derechos del imponente catálogo de canciones que compuso y grabó junto a Creedende Clearwater Revival, John Fogerty vive desde mediados de los noventa de atracón en atracón, combinando la edición de títulos en solitario como «Blue Moon Swamp» o el reciente «Revival» con conciertos que son un auténtico festín de rock eufórico y contagioso.Esto último, sin embargo, se sabía únicamente de oídas y gracias a álbumes en directo como «The Long Road Home», algo que cambiará esta noche (21.30) en cuanto la voz de aguardiente y lija del californiano resuene en el Sant Jordi Club en la que será su primera actuación en la capital catalana.Acompañado por Billy Burnette, Hunter Perrin, Jason Mowery (guitarras), Matt Nolen (teclados), David Santos (bajo) y Kenny Aronoff (batería), el autor de «Proud Mary» se estrena en Barcelona convertido en uno de los mejores y más influyentes compositores estadounidenses del siglo XX. No en vano estamos hablando de uno de los artistas que mejor supo entender el tránsito de los sesenta a los setenta anudando rock, soul y blues y viajando de la Bahía de San Francisco a los pantanos del Delta.En solo seis años, Fogerty y los Creedence grabaron siete discos, barrieron en las listas de éxitos y dejaron para la posteridad himnos como «Who´ll Stop The Rain», «Bad Moon Rising», «Fortunate Son», «Down On The Corner» o «Have You Ever Seen The Rain», clásicos que conformarán el grueso del concierto de esta noche. De hecho, Fogerty ha reconocido que, al tratarse de su primera gira por España, el material de la época 1968-1972 será más que abundante. Su paso por Murcia y Córdoba así lo atestigua: salvo cinco o seis guiños a su carrera como solita, todo el repertorio está dedicado a las canciones de Creedendce.