El empleo del corazón artificial en pacientes pediátricos sitúa al Hospital Reina Sofía de Córdoba como el principal referente a nivel regional en el uso de este tipo de implantes, que en todo el territorio nacional sólo se lleva a cabo en otras tres comunidades más (Madrid, Galicia y Cataluña). Así lo ha puesto hoy de manifiesto la consejera del ramo, María José Sánchez, que ha destacado que el complejo sanitario cordobés ha utilizado este mecanismo en tres pacientes y con buenos resultados.

Según ha apuntado Sánchez, «el corazón artificial permite esperar el trasplante con garantías y propicia la normalidad en el día a día de los pacientes infantiles. Nos coloca a la vanguardia de la innovación aplicada a la salud», ha dicho la consejera. 

La colocación de este dispositivo, denominado «Berlin Heart», permite estabilizar a enfermos en situaciones muy comprometidas y así llegar al trasplante en condiciones aceptables, ya que la estabilidad que proporciona el corazón artificial permite esperar hasta un año, aproximadamente.

El equipo encargado del último implante explicaron que el paciente ha sido un niño de ocho años de Málaga, que ya está dado de alta. El primer caso tuvo lugar en junio de 2009 en un bebé de 18 meses natural de un pueblo de Sevilla, mientras que el segundo caso tuvo lugar en octubre de ese mismo año.

Según ha explicado el doctor Juan Luis Pérez, «en muchos casos, no es posible sacar adelante a pacientes infantiles con los mecanismos convencionales», ya que la espera hasta conseguir un corazón es de cuatro a seis meses. «Pero con este dispositivo, pueden aguantar más tiempo y sin tener que estar sedados. Es decir, permanencen en el hospital, pero pueden llevar una vida como la de un enfermo crónico».

Por otro lado, en relación al nombramiento de José Manuel Aranda, hasta ahora gerente del Reina Sofía, como gerente del Servicio Andaluz de Salud, que dicha decisión «se engloba dentro de la política de cambios» que forman parte del proyecto liderado por la presidenta de la Administración, Susana Díaz.

«Estamos ante una nueva etapa y todo esto entra dentro de la normalidad en el funcionamiento de nuestras estructuras», ha apuntado Sánchez. Aranda, por su parte, ha querido ser cauto y esperar a que su nombramiento sea oficial. En cualquier caso, ha dicho sentirse con «ánimos y muchas ganas». De momento, no han querido avanzar quién tomará las riendas del Reina Sofía.