«Este desnudo se autodestruirá en cinco segundos...»

La fotografía de un desnudo puede ser una broma inocente, salvo que quien la reciba decida utilizara la con fines maliciosos. Puede enfadarse con el novio/a, por ejemplo, meses después y publicar esas fotos en las redes sociales . El sexting también puede obedecer a algún tipo de chantaje o amenaza de algún desconocido sobre los adolescentes. En cualquier caso, es bastante probable que quien ha enviado esa imagen se arrepienta tarde o temprano. Para esos casos, ha surgido una aplicación para iOS llamada Snapchat .

Esta app no se creó específicamente para enviar fotos de desnudos , pero como la imaginación no tiene fronteras muchos internautas le han encontrado esa función. En resumen, permite enviar una foto con un tiempo limitado de visión: caduca en diez segundos como máximo y uno como mínimo . Y, en principio, no deja hacer un pantallazo o bien avisa al remitente, lo que dificulta guardar esa imagen para colgarla meses o años después en sitios web en los que los «ex» publican imágenes conflictivas como venganza.

Los creadores, en su nota de privacidad, reconocen que no pueden garantizar al cien por cien que esa foto no haya podido ser guardada , por lo que, en cualquier caso, siempre existe un cierto riesgo de que el pasado regrese cuando menos lo pensamos. Incluso no hay ninguna garantía de que el receptor haga una foto de la pantalla con otro dispositivo. La Policía y la Guardia Civil, que lidian con frecuencia con casos de chantaje a los adolescentes para conseguir este tipo de imágenes, han advertido en diferentes ocasiones a los jóvenes del peligro de enviar mensajes con fotos o vídeos de tipo sexual .

Snapchat no es la primera aplicación que ayuda a utilizar los teléfonos en las relaciones tormentosas. The New York Times recuerda que tras los problemas del golfista Tiger Woods con sus mensajes de texto , una compañía llamada Tigertext creó una aplicación que los elimina después de haber sido leídos.